Los habitantes de Estados Unidos seguían este jueves a la espera de los resultados finales de las elecciones presidenciales, con el candidato demócrata Joe Biden más cerca aún de convertirse en el nuevo mandatario electo. El republicano Donald Trump, en tanto, sufrió tres reveses judiciales consecutivos en su ofensiva para detener el recuento de votos en estados decisivos.
Se definen las elecciones con Biden cerca de la victoria
Biden seguía a solo seis de los 270 electores que un candidato necesita para ganar la Presidencia de Estados Unidos, una cifra que alcanzará ganando en cualquiera de los cuatro estados donde aún sigue el escrutinio y donde todavía no fue proyectado un vencedor: Pensilvania, Georgia, Carolina del Norte y Nevada. El último conteo indicó que Trump acumulaba 214 votos electorales, mientras que su rival, 264.
"La democracia a veces es desordenada, por lo que a veces requiere un poco de paciencia", tuiteó este jueves Joe Biden. "Pero esa paciencia se ha visto recompensada desde hace más de 240 años con un sistema de gobierno que ha sido la envidia del mundo", agregó el candidato demócrata.
En Nevada, Biden estiró fuertemente su ventaja en unos 4.000 votos, desde los 7.647 a casi 12.000, informaron autoridades electorales al anunciar una nueva tanda de votos escrutados y alcanzar el 76%.
En Pensilvania, la Justicia decidió frenar el escrutinio y luego la Corte Suprema lo reactivó. Aún se están analizando recursos presentados por la campaña del presidente, pero el conteo continúa, ya alcanzó el 88% y la tendencia es que Biden está achicando la brecha.
En Georgia, en tanto, un juez rechazó una demanda interpuesta por la campaña de Trump para que se frenara el recuento hasta que se desecharan votos recibidos por correo y se fiscalizara que el escrutinio estaba cumpliendo con todas las leyes. Aquí faltan contar unos 47.000 votos y la diferencia es de casi 12.800 a favor de Trump, pero Biden avanzaba y achicaba esa ventaja.
Aunque los principales medios ya proyectaron a Biden como ganador en Michigan, la campaña de Trump había intentado frenar ese escrutinio en los tribunales, pero, como en Georgia, su pedido fue rechazado.
Carolina del Norte detuvo su escrutinio hasta la semana próxima, pero la atención no está puesta allí, donde Trump mantiene una ventaja también pequeña, pero con mejor proyección.
Denuncia en Nevada
Los republicanos interpusieron este jueves una nueva presentación judicial, esta vez en Nevada, para que se detenga el conteo de miles de votos que ven como "ilegales" en estas elecciones.
En conferencia de prensa en Las Vegas, el exfiscal general de Nevada Adam Laxalt y el exdirector nacional de inteligencia Ric Grenell dijeron que miles de personas votaron en Nevada pese a que ya no residen en el estado.
A lo largo del día, Trump, de 74 años, dejó claro una y otra vez que no aceptará la derrota en las elecciones sin cuestionarla tanto en lo discursivo como en lo judicial.
"Ganamos esta elección", dijo desde la Casa Blanca ayer, cuando denunció que había habido "fraude".
El presidente recurrió hoy a Twitter para volver a pedir que se frene el conteo de los votos.
"Cualquier voto que haya llegado después del día de las elecciones no será contado", escribió hoy el presidente en Twitter. "Detengan el conteo", exigió.
En paralelo, su campaña emitió un breve comunicado para reforzar su ofensiva en la Justicia: "Si cuentan los votos legales, ¡fácilmente gano la elección! Si cuentan los votos ilegales y tardíos, ¡nos pueden robar la elección!".