Tras una semana llena de especulación que terminó con la sorpresiva eliminación de Daniela, este lunes, Santiago del Moro anunció el ingreso de seis integrantes a la casa de Gran Hermano. "Son personas queridas por ellos que entran a jugar", explicó el conductor.
Gran Hermano 2022: se vivió la gala más emotiva
Seguidamente, pasó a presentar a la primera familiar: Valentina, la hermana de Marcos que vive en Francia con su pareja. "Está muy nerviosa", acotó y le dio el ingreso a la participante. Alrededor de las 22:30 presentó a Florencia, la hermana gemela de Camila. Oriunda de Ituzaingó, es jugadora de fútbol y ataja profesionalmente en la primera división de Independencia.
Primeramente Valentina llegó a la casa cuando su hermano estaba en el cuarto. Cuando sus compañeros empezaron a llamarlo, el salteño no demoró en emocionarse y se estrechó en un abrazo eterno con ella, mientras ambos lloraban. La muchacha recibió la bienvenida de todos los participantes, que no entendían del todo lo que estaba pasando. "Mirá hasta dónde me traés, qué me estás haciendo", decía.
Regresando al estudio, del Moro presentó a Gladys, la madre de Lucila 'la Tora' y admitió que también estaba sumamente nerviosa. Unos pocos minutos después se registró la entrada de la gemela de Camila a la casa, quien salió a su encuentro llorando. Mientras ambas se abrazaban, sus compañeros festejaban ilusionados, pensando en la posibilidad de que también entren sus seres queridos. "Te estaba extrañando", dijo Camila entre lágrimas, mientras su gemela trataba de contenerla. A los diez minutos ingresó Gladys que no dudó en tirar la valija y abrazar a sus hija. "Gracias mami por animarte", expresó Lucila.
Romina esperaba el ingreso de sus tres hijas, Mía, Felicitas y Nina, pero se desilusionó al ver a Fabián, su sobrino y ahijado. Mientras abrazaba al joven de 22 años, la ex diputada manifestó: "¡Pensé que las iba a ver! ¿Por qué no las dejaron entrar?". A continuación ingresó Camila, la hermana de Julieta que también se dedica a la creación de contenidos en redes. Al verse, las hermanas se fundieron en un abrazo largo y sentido, con muchas lágrimas. "¡Qué linda estás!", exclamó Poggio mientras le daba la bienvenida a la casa y se apresuró para preguntarle por su novio, Lucca, y se preocupó, pues pensaba que sería él quien entraría a la casa. Camila, sin embargo, recibió instrucciones estrictas de no dispensar información del exterior. "Era solo para familiares", fue lo que alcanzó a decir la también influencer. El último en ingresar a la casa fue Rodolfo, el papá de Nacho. El participante corrió a recibir a su padre y se dieron un largo abrazo bajo el aplauso y emoción de sus compañeros.
"Los familiares deben dormir en un cuarto separado de los jugadores. Es decir, antes de irse a dormir, tienen que separar cuartos de jugadores de cuartos de visita", explicó el conductor como última regla. Minutos después habló el dueño de la casa, Gran Hermano: "Espero que la pasen bien, que disfruten y se diviertan" y cuando fue consultado por el tiempo que durará la visita, su respuesta fue críptica: "No sabe, no contesta".
"No se me dispersen ahora", advirtió del Moro, "entró gente que ustedes aman. No los expongan. Se los digo a todos: a los que están adentro y los que vinieron de afuera. Una jugada en falso que Gran Hermano detecte y evalúe como infracción y el jugador será enviado directamente a placa y las visitas serán expulsadas. No pregunten cosas que quieran saber. Les recomiendo que no hablen mucho del afuera". Finalmente, la producción del programa les regaló una picada para compartir, así como algunas bebidas para celebrar en familia.