En los primeros minutos de la madrugada de ayer un inquilino del edificio de calle Gualeguaychú 240 abrió el portón de la cochera y entró con su auto. Tras subir la rampa de entrada observó a una mujer tirada en el suelo, con la cabeza ensangrentada. Llamó a la Policía para pedir auxilio y salió a la calle, justo cuando pasaba un móvil del 911, le hizo señas y le contó a los policías lo sucedido. Enseguida una ambulancia subió a la mujer y la llevó al hospital San Martín. Se trata de una señora de 69 años que vive en el octavo piso de ese edificio, junto a su hijo de 29 y su madre de 93.
Atacaron a golpes en la cabeza a una mujer en la cochera de un edificio
El personal de la comisaría segunda intervino en el lugar y dio aviso de lo sucedido a la fiscal Mercedes Nin, quien a su vez dispuso la colaboración de la División Homicidios y de Criminalística.
El edificio no cuenta con cámaras de seguridad, por lo que se ubicaron algunas de las inmediaciones que serán revisadas para ver si surge algún dato o sospechoso.
Alrededor de las 11.30, algunos vecinos del edificio dijeron haber escuchado un grito y un ruido similar a chapas, pero nadie salió a ver porque es habitual que se peleen los gatos en los techos linderos.
Aún no se ha determinado si la mujer fue atacada al regresar de hacer la carga al celular o si no alcanzó a salir del edificio. Le faltaban sus pertenencias, como llaves, dinero y celular.
Todavía no se descarta ninguna hipótesis, ni que se trata de una agresión en un asalto al voleo o de alguien conocido de la víctima. La cochera tiene como acceso único el portón eléctrico, pero hay una forma de ingresar más difícil. El año pasado robaron una bicicleta sin que hasta ahora nadie sepa cómo sucedió. También es posible que el delincuente haya ingresado sigilosamente cuando entró otro vehículo y se quedó adentro a esperar a una víctima.
La mujer está Terapia Intensiva, pero según se informó a UNO los últimos estudios médicos fueron favorables. Su recuperación será clave para que pueda declarar y ayudar a detener al agresor.