Después de la histórica victoria que celebró Patronato el pasado sábado ante Boca Juniors, en el estadio Grella, el plantel fue licenciado. Los futbolistas iniciaron el periodo de descanso y volverán a los entrenamientos el 31 de mayo con vistas a los desafíos que encararán en el segundo semestre del año: la próxima edición de la Copa de la Liga Profesional y el encuentro de octavos de final de la Copa Argentina.
Patronato está de licencia y en plena negociaciones
Quienes no descansan son los integrantes de la mesa chica de la dirigencia y el cuerpo técnico. El contacto es permanente para diagramar la estructura que continuará formando parte del Rojinegro en el proceso. En este sentido, cuatro contrato finalizarán el próximo 30 de junio, de los cuales intentarán retener dos de ellos. Se trata de Oliver Benítez y Lautaro Torres.
Ambos arribaron a la entidad de barrio Villa Sarmiento a inicios de 2020 de la mano de Gustavo Álvarez. El defensor fue uno de los habituales titulares en el ciclo Delfino, aportando dos conquistas a la campaña (descontó en la derrota ante Lanús y abrió el camino del triunfo ante Aldosivi de Mar del Plata). En el torneo que acaba de terminar para Patronato Benítez disputó 8 de los 13 encuentros más el partido por los 16avos de final de la Copa Argentina.
Torres gozó de menos espacio (solamente jugó 4 partidos en la Liga Profesional y el choque por Copa Argentina). Aunque el Lacha ganó mayor terreno tras haber convertido el histórico gol que decretó el triunfo de Patronato ante Boca.
En la previa la situación de Benítez parece más sencilla dado que el pase es jugador libre. En cambio Torres deberá retornar a Ferro el próximo 1 de julio. El Rojinegro cuenta con la opción de adquirir el pase, pero la intención es gestionar un nuevo préstamo. La empresa no será sencilla dado que el Verdolaga se encuentra peleando el ascenso a Primera División.
Los otros dos futbolistas a los que se le vence el contrato son Mateo Komar y Bruno Chávez, quienes no gozaron de espacio en Primera División.