¿Quién dijo que los domingos están hechos para descansar? Si la intención es fomentar un crecimiento sano de los chicos, hay que impulsarlos a realizar actividades deportivas y acompañarlos.
Encuentro de Azul y Oro
La Escuela de Fútbol Infantil organizó ayer un certamen no competitivo con la participación de más de mil niños.
19 de septiembre 2016 · 08:00hs
Ayer el fútbol infantil vivió una verdadera fiesta.
La Escuela Azul y Oro organizó su séptimo encuentro. En el predio de Muper fue el escenario de las actividades que contaron con la participación de miles de niños de representando a distintos clubes y entidades de la capital entrerriana, el interior de la provincia y también Santa Fe.
Desde horas muy tempranas se fue armando el clima de fiesta. A la llegada de los impulsores del acontecimiento se le fueron sumando las delegaciones de chicos, junto a padres, hermanos, abuelos, vecinos. La familia se reunió para acompañar, alentar y estimular a los pequeños que buscan a través del deporte un momento de distracción.
El programa previsto se fue desarrollando con absoluta normalidad y dentro de un clima de convivencia que ningún resultado pudo quebrantar a lo largo de toda la jornada.
Los distintos cotejos sirvieron para ver en acción a posibles futuros talentos, las repentizaciones propias, dentro y ajenas al fútbol, de los purretes que arrancaron más de una sonrisa en la multitudinaria concurrencia.
El que todos comprendieran de que de que se trataba la cuestión, que no va más allá de un juego de niños hizo que el clima de fiesta perdurara en el transcurso de toda la jornada.
Hubo resultados que determinaron ganadores y otros que no pudieron serlo. Pero lo más importante fue ver la felicidad de todos compensada con la entrega de un trofeo para cada uno de los participantes.
Sin dudas que es de esperar que este tipo de acontecimientos, ya sea organizado por Azul y Oro u otra entidad se repita. Para de esa manera fomentar una niñez sana. Cerca del deporte y lejos de los vicios.