El presidente Alberto Fernández encabezó este martes una reunión en la Casa Rosada con integrantes del Grupo de Puebla, foro político y académico progresista y, en ese contexto, se confirmó la continuidad de la Argentina y otros cinco países en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Alberto Fernández se reunió con el Grupo de Puebla antes de que hable Cristina
Por la tarde, los integrantes del Grupo y los ex mandatarios participarán en el Centro Cultural Kirchner (CCK) de un encuentro internacional de respaldo a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner ante sus causas y su condena judicial por corrupción. Lo cerrará la propia ex Jefa de Estado, convocado bajo la consigna "Voluntad popular y democracia", en el marco del III Foro Mundial de Derechos Humanos.
No está prevista la presencia en ese acto de Alberto Fernández ,quien junto a su vicepresidenta evitaron coincidir en los respectivos encuentros con líderes regionales, en el marco de la tensión que existe dentro del binomio presidencial en particular, y de la coalición de gobierno en general.
El encuentro encabezado por Alberto Fernández se desarrolló desde las 10.50 en el Salón de los Pueblos Originarios. “En América Latina estamos todos en el mismo bote, y la construcción de la unidad debe dejar de lado la utilización política, porque eso nos condena a más postergación. Por eso debemos revitalizar cuanto antes a la Unasur", afirmó el mandatario en el cierre del encuentro.
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De esta manera, la Argentina normaliza su presencia en el bloque, interrumpida durante el gobierno de Cambiemos. Actualmente está integrado por Guyana, Surinam, Bolivia, Venezuela y Perú.
En este sentido, Alberto Fernández instó a “ponernos de acuerdo en la necesidad de construir un bloque regional como mecanismo de autodefensa porque nadie se salva solo”, y consideró que “si Brasil y Argentina estamos adentro, la Unasur tendrá otra potencia y tendremos que avanzar para que todos los países hermanos vuelvan a encaminarse” hacia este bloque regional.
El expresidente colombiano, Ernesto Samper, consideró con la vuelta de Argentina Unasur "se amplía, retoma las banderas sociales del progresismo en América Latina" y aclaró: "Eso no quiere decir la exclusión de otras banderas ideológicas como se hizo en el pasado cuando se crearon clubes ideológicos contra la integración", comentó en referencia al Grupo de Lima que conformaban exmandatarios como Mauricio Macri, Sebastián Piñera (Chile) y Jair Bolsonaro (Brasil).
Samper señaló que, por otro lado, "una de las tareas del Grupo de Puebla es la defensa de los lideres progresistas que son víctimas de sistemas de persecución judicial" y que se busca "respaldar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que ha sido víctima como (Luiz Inácio) Lula (da Silva), como (Rafael) Correa, como Evo Morales, de estos ataques de las guerras jurídicas, que tienen un origen internacional".
Por su parte, el expresidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, mostró su alegría por la realización de "un congreso mundial de los derechos humanos", en referencia al Foro Mundial por los Derechos Humanos que se realiza en Buenos Aires esta semana.
"La Argentina se ha ganado ser el país que lidera la lucha por los derechos humanos en estos últimos 40 años. Es un título que lo honra como país. El Grupo de Pueblo lo reconoce así y no hay mejor manera de luchar por los derechos humanos que unir a pueblos. Para muchos de los demócratas del mundo, la determinación de derrotar a Bolsonaro, a la extrema derecha en Chile, de detener el golpe en Bolivia, hacen de este continente el continente de la esperanza democrática", apuntó.
También estuvieron presentes los expresidentes de Ecuador, Rafael Correa; y de Bolivia, Evo Morales.