El Arzobispado de Paraná anunció que en "Stella Maris ya no habrá comunidad religiosa" porque la hermandad "Del Verbo Divino" de Valle María fue cerrada.
Valle María: cerraron la comunidad Del Verbo Divino
La información oficial da cuenta que la Congregación del Verbo Divino -hermandad ubicada en la Casa Stella Maris en la localidad de Valle María- fue cerrada.
Si bien la publicación que se compartió desde la Arquidiócesis está fechada el pasado 30 de diciembre, la comunicación del Superior de la Congregación del Verbo Divino, para la Provincia Argentina Sur, R.P. Marcelo Cattaneo, SVD, fue enviada el 20 de diciembre de 2023.
De este modo, se informó además, que se trasladan a todos sus miembros a otros destinos pastorales.
La casa, ubicada a 30 kilómetros de Paraná, seguirá funcionando como lugar de encuentros y retiros, bajo la gestión de los actuales administradores.
Vida diocesana
Por otra parte, mediante decreto de monseñor Juan Alberto Puiggari se designó al presbítero Mario Roberto Olea, SVD, como vicario parroquial de la parroquia Inmaculada Concepción en Valle María.
Además, la normativa indica que se delega al presbítero Olea, SVD, las facultades generales para asistir los matrimonios que se celebren en jurisdicción de dicha parroquia.
"Al tomar posesión de su oficio, hará profesión de fe y prestará juramento de fidelidad ante el párroco y la comunidad", se señaló.
La comunidad religiosa
Los primeros misioneros de la Sociedad del Verbo Divino llegaron a Argentina en 1889. En la Arquidiócesis de Paraná la presencia de los Servidores del Verbo es actualmente en las comunidades de San José de Crespo e Inmaculada Concepción de Valle María.
En el año 1889 -en respuesta a insistentes pedidos de asistencia espiritual- llegaron los 2 primeros misioneros del Verbo Divino a Argentina, que fueron los padres Enrique Becher y Germán Löcken.
Comenzaron atendiendo a los inmigrantes europeos, de preferencia suizos y alemanes del Volga, religiosamente abandonados en sus colonias de Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires. Más tarde extendieron sus trabajos a muchos puntos del país, destacándose en el campo de la prensa, la educación, la formación del clero y, sobre todo, en el envío de misioneros ‘ad gentes’.
Argentina pasó a ser uno de los países de mayor presencia Verbita en el mundo.
La congregación fundada por San Arnoldo Janssen en 1875 envió a sus primeros misioneros a China y su segundo campo de acción fue la Argentina. A los contemporáneos del padre Arnoldo les causó extrañeza que éste aceptara enviar su gente a Latinoamérica, y el hecho suscitó juicios encontrados dentro y fuera de la incipiente sociedad misionera. La actitud del fundador revela que en su mente el concepto de misión tenía un sentido muy amplio, que no se reducía al primer anuncio de la Palabra, sino también a la conservación de la fe y la vida cristiana donde éstas corrían riesgo de perderse.
Este era, precisamente, el caso de numerosos inmigrantes de habla alemana que desde hacía unas décadas vivían en la Argentina. Urgido por insistentes pedidos de asistencia espiritual provenientes de colonos alemanes y suizos radicados en la provincia de Santa Fe, Janssen solicitó y obtuvo de la Sagrada Congregación de Propaganda Fide la autorización para enviar sus primeros misioneros a la Argentina.
Tras el despliegue de la acción pastoral por las colonias de habla alemana en Entre Ríos, Santa Fe y sur de Buenos Aires y La Pampa, los verbitas comienzan a extenderse hacia Chile y Paraguay. Una fecunda acción los lleva a fundar colegios, una editorial, librerías, atender seminarios y parroquias en la Capital Federal y en las provincias de Jujuy, Misiones, Córdoba, Neuquén, Mendoza, Chaco.
En la actualidad, la página de los verbistas indica que "están en la vanguardia misionera de la Iglesia, trabajando preferentemente en lugares donde todavía no se conoce el Evangelio o entre las comunidades más necesitadas. Promoviendo la dignidad de las personas, los derechos humanos y la defensa del medio ambiente".
La Casa Stella Maris
La Casa de Retiros “Stella Maris” que perteneció a la Congregación del Verbo Divino (SVD) está ubicada en el ejido de la localidad de Valle María, departamento de Diamante y se la considere un “Lugar Histórico de Entre Ríos”.
La edificación se encuentra a escasos metros de la Ruta Provincial Nº11, en su kilómetro 33. Es un hermoso predio donde la tranquilidad, el silencio, y la contemplación de la naturaleza se adueñan del tiempo de los visitantes.
El lugar -lleno de paz- está enclavado en una geografía dominada por suaves lomadas entrerrianas a escasa distancia del casco céntrico de Valle María y a pocos kilómetros de la ciudad Diamante.
Fue inaugurada en el año 1952, pensada para funcionar como un Preseminario de la Congregación misionera del Verbo Divino. En un edificio de dos plantas de grandes proporciones el que albergó un renombrado colegio con internado, el que funcionó hasta 1981, trocando desde esa fecha su función a casa de retiros y descanso para alojar temporalmente a colegios e instituciones laicas, religiosas y eclesiásticas de todo Argentina. Miles de estudiantes concurren todos los años levantar campamentos y actividades espirituales, recreativas y deportivas. Cuenta con capacidad para albergar y dar pensión completa a más de un centenar y medio de personas.