Aunque restan finalizar las pruebas de ADN, todos los indicios apuntan a que el cuerpo hallado en San Juan el martes pasado es de Marta Emilia Altamirano, una andinista tucumana que desapareció el 27 de marzo de 1981 en un accidente en pleno ascenso.
Habrían hallado el cuerpo de una andinista desaparecida hace 42 años
Los restos de "Paty", como se la apodaba, nunca pudieron ser rescatados hasta que un grupo integrado por argentinos y norteamericanos lo visualizaron cuando recorrían la cara sur del cerro Mercedario, a 6.720 metros sobre el nivel del mar. Sus familiares están expectantes por los resultados que arrojarán los estudios de rigor.
Marta tenía 20 años cuando emprendió su viaje a tierras sanjuaninas, junto a su hermana Corina y a Sergio Bossini, un reconocido andinista italiano. Según lo que figuran las crónicas periodísticas de la época, los tres llegaron al cerro el lunes 23 de marzo de 1981. Cinco días después, el grupo decidió tomarse un descanso tras una jornada intensa de subida e instalaron un campamento para pasar la noche, pero de un momento a otro pasó la tragedia: "Paty" se apartó unos pocos metros de sus compañeros para recorrer la zona donde paraban, pisó en falso, se resbaló y cayó en medio de una grieta.
Los restos de Corina y Sergio por rescatarla fueron en vano. Según sus testimonios, la vieron fallecida en una en una grieta del Glaciar del Caballito y no pudieron sacarla del pozo. El domingo 29 debieron iniciar el descenso de la montaña. Pese a los reiterados intentos por rescatar el cuerpo de Marta, que quedó atrapado en las nieves eternas del Mercedario, no se pudo lograr el objetivo y sus allegados se rindieron.
LEER MÁS: Estacionar en la zona céntrica es cada vez más complicado
Más de cuatro décadas después, todo indicaría a que los restos de la andinista tucumana finalmente fueron rescatados el pasado sábado, gracias a la expedición que integró la policía sanjuanina, Gendarmería y miembros de la Unidad Fiscal de Investigación. Las probabilidades de que el cuerpo pertenezca a "Paty" son altas, ya que sólo habían registros de una sola desaparición a esa altura del Mercedario. En el caso que se trate de ella, el gobierno provincial ya entabló comunicación con sus hermanos a fines de recibirlos y proceder a realizar el reconocimiento por parte de algunos elementos y prendas recuperadas del cuerpo.
Corina dialogó con los medios y dijo que escalar el Mercedario era una meta que se propusieron entre hermanas. "El andinismo es encontrarse con uno mismo y estar a solas con tus fortalezas y fuerza de voluntad puesta al servicio de llevar acabo esto de escalar un cerro. Es un modo de vida", explicó la mujer que ahora tiene 60 años. Según indicó, la elección del cerro sanjuanino no fue al azar, ya que habían escalado hasta los cerros más altos de Tucumán y viajaron a San Juan con el objetivo de continuar adquiriendo experiencia para algún día escalar el Aconcagua. "No fue negligencia y tampoco nos perdimos, todo fue realizado con mucha responsabilidad", aclaró en referencia al accidente.