Aquellas personas que buscan un receso de su jornada laboral para disfrutar, generalmente sienten un obstáculo para poder descansar realmente, desligarse de la rutina y las tareas diarias. La psicóloga cognitiva conductual y instructora en Mindfulness Yanina Michel (Matrícula 2.548) explica cómo se debe actuar para poder poner el cerebro en modo vacaciones.
Cómo poner el cerebro en modo vacaciones
Cómo poner el cerebro en modo vacaciones
Cómo poner el cerebro en modo vacaciones
Gentileza: Termas de Colón
Cómo poner el cerebro en modo vacaciones
Cómo poner el cerebro en modo vacaciones
Llega el mes de enero, comienzo de un nuevo año y muchas personas recurren a tomarse sus respectivas vacaciones del trabajo para descansar de los ritmos de vida estresantes. De igual manera, les cuesta desconectarse del celular, del e-mail, de los grupos de WhatsApp y todo aquello que tenga relación con la rutina diaria el resto del año. "Es muy difícil si nosotros no tenemos el hábito de desconectarnos a lo largo del año, si no tenemos el rédito de en algún horario del día desconectarnos, se dificulta", indicó la psicóloga y agregó: "Tiene que ver con tener a disposición las notificaciones del celular, que no lo apaguemos y que no podamos administrar el tiempo que pasamos frente a él". Por supuesto que cada caso se da de forma particular, pero en líneas generales se busca "desenchufarse" de la cotidianeidad y esto se centra sobre todo en la desconexión los grupos de WhatsApp del trabajo: "Siempre está mal visto poner límites. Acá no nos tiene que importar si cae bien o mal, sino lo que necesito. Puedo archivar el grupo y no ver las notificaciones".
Una de las preocupaciones mas frecuentes de las personas que les cuesta desconectarse del trabajo, tiene que ver con la pregunta de ¿Qué pasa si me necesitan? ¿Cómo me contactarán? . En ese marco, luego de evaluar la situación, la psicóloga propone: "Hay que ser sinceros y preguntarse ¿Es necesario que esté pendiente al teléfono 24 horas? ¿Necesito descansar sin gastar?". Muchas veces suele ocurrir que si no se especificó el tipo de descanso que necesita cada persona, suelen volver a su rutina diaria más abrumados: "Si para mi es importante en este tiempo dormir, hay personas e invitaciones a las que les voy a decir que no".
En conclusión, la licenciada sugiere que los límites sin miedos, las pausas, los descansos y los hábitos se practiquen durante todo el año.