El entrenador de fútbol Diego Fernández lanzó su tercer obra literaria que bautizó bajo el nombre “Ganar, un objeto de consumo”. En este libro el ex-arquero de Patronato pone en debate la realidad que domina el mundo del deporte. El escenario donde el resultado inmediato es más importante que el proceso que desarrollan las instituciones para alcanzar la meta.
"Ganar, un objeto de consumo", el libro que debate la histeria resultadista
En su tercer libro el entrenador Diego Fernández ubicó el foco en el sistema exitista donde el término presión ganó mayor espacio que el disfrute.
En su tercer libro el entrenador Diego Fernández ubicó el foco en el sistema exitista donde el término presión ganó mayor espacio que el disfrute.
“La palabra presión se escucha más que la palabra jugar, y la angustia, la frustración y el temor han acaparado el caminar de todos. ¿Cómo pasamos del disfrute al sufrimiento?”, interroga Fernández en el prólogo del ejemplar.
¿Un mundo solo de victorias? Es otro de los interrogantes que realiza el autor de esta obra. Encuentra algunas respuestas en frases de grandes exponentes del ámbito deportivo. Uno de ello es Carlos Salvador Bilardo.
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Durante varias décadas el entrenador que se coronó campeón del mundo con la Selección Argentina en México 86 afirmó que ganar no era lo más importante, sino lo único. “En una de las últimas notas que brindó dijo que había dejado muchas cosas por ganar. El periodista le recuerda que fue el mejor del mundo. Carlos le responde ‘no sé si valió la pena’, rememoró Fernández, en diálogo con La Mañana de La Red.
“En el libro hay otra frase de John McEnroe que dice: ‘desde muy chico te dicen que hay que ganar, que hay que hacer lo que sea para ganar... ¿vale la pena al final’.
La crítica de Diego Fernández
“Durante muchos años hemos recibidos esos mensajes que indica que ganar no es lo más importante sino lo único, que el segundo es el mejor de los perdedores, que han hecho mucho daño, sumado a este caminar social que es el vértigo con el que vivimos, de satisfacción inmediata. Por eso pregunto: ¿por qué ganar es un objeto de consumo? Porque hay una bulimia de resultados. En el libro transcribo a un colega español que indica que ya no alcanza ni el ganar. Vos salís campeón del mundo y ya tenés que salir campeón de la Copa América, y ya ahora tenés que salir campeón en el próximo Mundial”, subrayó.
La industria del resultado positivo inmediato transformó al banco de suplentes en una silla eléctrica. Al deporte de alta competencia en una trituradora de carne. “En la temporada 2024 72 cuerpos técnicos se fueron de sus equipos entre Primera División y Primera Nacional. Es una locura. Va todo tan rápido que nadie hace una reflexión”, cuestionó.
Siguiendo esta línea, detalló un ejemplo que fue realizado en un medio de comunicación de Santa Fe que sigue la campaña de Colón. “Los comunicadores indican que debe traer un entrenador que conozca la categoría y a los jugadores. El año pasado contrató a (Iván) Delfino, pero en un torneo de 30 y pico de fechas fue despedido cuando ingresó en una meseta de dos, tres fechas. La inmediatez de resultados tal vez nos hubiera privado de hablar de Scaloni si Armani no hubiera atajado el penal a Paraguay en la Copa América 2019 o de Gallardo si Barovero no le desviaba el remate a Gigliotti”, señaló.
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“Siempre digo una frase siempre que la oruga no necesita un milagro para convertirse en mariposa; necesita un proceso. Si vos creés que, al cambiar cada cinco fechas un técnico vas a mejorar, la mejora no será desde la causalidad, sino desde la casualidad. Tenías un técnico, preparó un equipo, trajo los refuerzos, no arrancó en cinco fechas, pero capaz que el trabajo fue muy bueno. Nos pasó cuando trabajamos en Independiente Rivadavia de Mendoza en la temporada 2023. Armamos el plantel con Ever Demaldé, el equipo jugaba bien, funcionaba, estuvimos ocho fechas, vino (Alfredo) Berti con el mismo equipo, con el mismo sistema, los mismos nombres propios y salió campeón. Ahí es donde uno entra y dice, ‘vamos a parar la pelota’. Sé que están las presiones de los hinchas, hay un montón de presiones, pero no podés dejarte llevar por la ola de las presiones. Eso demuestra que no estás capacitado para estar en el lugar que estás”, aseveró.
La planificación bajo la presión de ganar o ganar
En este escenario de histeria resultadista, planificar un trabajo a corto es un verdadero desafío. “Ahí los entrenadores debemos ser responsables de lo mediato y no cómplices de lo inmediato”, relató. “No podés llegar a un club y decir, ‘voy a preparar para ganar las tres primeras fechas y después veo’, eso es imposible. Estoy muy en contra cuando un colega se sienta en una conferencia de prensa e indica que va armar un equipo para ganar. Con esa declaración está engañando a la gente porqué está armando un equipo para competir de la mejor manera. Y a través de esa manera puedas superar al rival y por ahí pueda ganar, porque el ganar es multifactorial. A veces que jugando mucho mejor que el rival, no ganas”.
Por otro lado, Fernández afirma que no alcanzar un éxito deportivo en lo inmediato abre la puerta de las frustraciones. En este sentido indicó que se le da una connotación mayor a las derrotas. “Me encanta ganar. Fui futbolista profesional durante 20 años. ¡Imaginate si no me gusta ganar! ¿A quién no le gusta ganar? La pregunta no es si me gusta ganar, sino que debería ser: ¿Cómo gestionar el perder?. Para responder este interrogante utilizo una frase de cabecera que indica que ganar no es tener miedo a perder. Hoy se ve mucho más miedo a perder que ganas de ganar”, disparó el oriundo de la localidad bonaerense de Punta Alta.
¿Cómo se puede adquirir el libro "ganar, un objeto de consumo"
El autor de esta obra lanzó la pre-venta de “ganar, una obra de consumo”. Los interesados en esta propuesta podrán reservar su ejemplar a través de las redes sociales: diegofer30 en Instagram, Diegofer30H en X y Diego Fernández en Linkedin.