Ya se juega en el estadio Arquitecto Ricardo Etcheverri el encuentro entre Patronato y Ferro Carril Oeste, correspondiente a la 34ª y última fecha de la Zona A en la Primera Nacional. Este partido marca el cierre de la fase regular antes del inicio del Reducido, donde se definirán los ascensos.
Ferro, en una ráfaga, le ganó 3 a 1 a Patronato
Cuando parecía que Patronato se paraba mejor en el campo, Ferro aprovechó dos situaciones y sacó dos de diferencia en el marcador.
Prensa Patronato
Patronato y Ferro se enfrentan en Caballito
Patronato pierde ante Ferro en Caballito
Patronato y Ferro ya juegan en Caballito por la última fecha de la Zona A.
El arbitraje está a cargo de Julio Barraza, quien dirige su último encuentro como juez profesional tras una extensa trayectoria. Lo acompañan los asistentes Diego Romero y Francisco Gugliota, mientras que Guido Mascheroni cumple funciones como cuarto árbitro.
Ferro derrotó a Patronato en Caballito
En el estadio Ricardo Etcheverry, Ferro le gana 3 a 1 a Patronato por la última fecha de la Primera Nacional, en un encuentro de trámite parejo pero con mayor claridad del conjunto local en los metros finales.
El Rojinegro arrancó bien parado, con un bloque compacto en el medio y la intención de presionar alto, aunque sin profundidad. En los primeros minutos, el desarrollo fue equilibrado, con mucha fricción y escaso peligro en las áreas. Sin embargo, a los 10 minutos, el Verdolaga encontró la ventaja: Francisco Cuzzani filtró un pase preciso para Franco García, que se metió entre Moreyra y Escobar, y definió cruzado ante la salida de Alan Sosa para establecer el 1 a 0.
Después del gol, Ferro se adueñó de la posesión, mientras Patronato se mostró errático y con dificultades para conectar en ataque. A los 21 minutos, Julián Marcioni debió ser reemplazado por lesión, ingresando en su lugar Valentín Pereyra.
El elenco paranaense tuvo una de las pocas aproximaciones claras con una buena jugada individual de Maxi Rueda: el lateral derecho se proyectó, combinó con Bonansea y probó desde afuera del área, aunque sin exigir demasiado a Monetti.
Con el correr de los minutos, el local siguió manejando la pelota pero sin generar nuevas chances de riesgo. Patronato, en tanto, busca ordenarse y encontrar respuestas ofensivas para intentar igualar antes del descanso.
En los minutos finales, el encuentro cayó en un pozo futbolístico. Ferro siguió teniendo la pelota, pero sin profundidad, mientras que Patronato no logró inquietar al arquero rival. Antes del cierre, Cuzzani volvió a aparecer con peligro, pero Sosa achicó rápido y evitó el segundo tanto.
Con un minuto de adición, el primer tiempo se fue sin sobresaltos y con el local arriba en el marcador por la mínima diferencia.
Segundo tiempo
El complemento comenzó con la misma tónica del primer tiempo: un desarrollo cerrado, sin grandes sobresaltos ni situaciones de riesgo en las áreas. Ambos equipos se repartieron la tenencia del balón y apostaron más a la fricción que al juego asociado. Ferro, fiel a su idea, intentó sostener la pelota y moverla con paciencia, mientras Patronato buscó salir rápido pero seguía impreciso en los metros finales.
Sin embargo, con el correr de los minutos, el conjunto paranaense comenzó a adelantar sus líneas y a encontrar más claridad en el mediocampo. A partir de la movilidad de Juan Barinaga y el ingreso activo de Valentín Pereyra, el Rojinegro empezó a tener más profundidad por las bandas. En ese contexto, llegó la jugada que cambió la historia.
A los 15 minutos, Patronato hilvanó una gran acción colectiva que derivó en el empate. Todo nació en los pies de Barinaga en mitad de cancha, quien abrió hacia la derecha para Pereyra. El volante se llevó la marca de dos rivales y devolvió de primera para Barinaga, que ya se perfilaba de frente al arco. Sin dudar, el mediocampista metió un pase preciso para Maxi Rueda, que devolvió de primera en una pared perfecta. Barinaga levantó la cabeza y envió un centro medido al corazón del área para el cabezazo firme de Joaquín Barolín, que conectó con potencia para el 1-1.
El joven delantero, que había ingresado en la segunda parte para darle frescura al ataque, marcó su primer gol como profesional. Emocionado, lo celebró con todos sus compañeros y regresó al centro del campo con lágrimas en los ojos, en una postal que sintetizó el desahogo del juvenil por lograr convertir.
Sin embargo, la alegría duró poco. Ferro respondió con decisión y generó dos tiros libres consecutivos en el borde del área. El primero reventó el travesaño, pero en el rebote, el árbitro sancionó otra falta aún más peligrosa. Esta vez, Gino Olguín se hizo cargo de la ejecución y no perdonó: remató bajo y al palo del arquero. Alan Sosa, tapado por la barrera, no alcanzó a reaccionar, y el local volvió a ponerse en ventaja con un disparo certero que selló el 2-1 parcial.
El envión anímico impulsó al equipo local, que en una ráfaga liquidó el partido. A los pocos minutos, Nicolás Montiel protagonizó una gran jugada individual: se sacó varios hombres de encima, ingresó al área y lanzó un centro bajo que encontró a Tiago Esidin, el juvenil que empujó la pelota para establecer el 3-1 definitivo.