La primera semana de abril comenzará la actividad correspondiente a la fase de grupos de la Copa Libertadores de América. En esta instancia Patronato tendrá su bautismo internacional. El Rojinegro hará realidad un anhelo que parecía lejano en el tiempo al consagrarse campeón de la edición 2022 de la Copa Argentina. A partir de ahí comenzó a proyectar su participación en el trofeo más importante de clubes de Sudamérica.
En Patronato están listo para la inspección de Conmebol
Por Matías Larraule
El 23 de noviembre integrantes de la comisión técnica oficial de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) visitaron las instalaciones de la institución de barrio Villa Sarmiento. Tras recorrer el estadio Presbítero Bartolomé Grella los inspectores comunicaron cuáles eran las obras necesarias para transformar a la Comarca Rojinegra en un escenario apto para los juegos de un torneo organizado por el organismo.
El foco estuvo enfocado en primer lugar en el campo de juego. En este punto en el Santo realizaron una obra importante en la nivelación del escenario hacia los cuatro costados. Toda la comunidad se comprometió con la causa. En este sentido socios y simpatizantes se acercaron al templo sagrado para extender su mano y aportar un grano de arena. Desafiaron a las altas temperaturas que gobernaron en la capital entrerriana entre Navidad y la celebración de fin de año. En la última semana del año extrajeron los panes del césped para trasladarlo hacia el gimnasio cubierto de la entidad. Una vez finalizada esa etapa ingresaron al escenario las maquinarias para comenzar con la nivelación del suelo.
Los trabajos que se llevaban adelante en barrio Villa Sarmiento obligaron a mudar la sede. De esta manera Patronato inició su camino en el campeonato de la Primera Nacional en el estadio Pedro Mutio. Al mismo tiempo aceleraron las obras en los distintos sectores del Grella.
El campo de juego fue nivelado. A su vez se reformó el sistema de riego y se realizó la siembra con semillas de césped de verano y de invierno. Además se realizó una reforma en el sector de blanco de suplentes.
Mejorar el sistema lumínico es otro de los puntos que en el Santo debieron progresar. En este ítem reforzaron el trabajo realizado durante la temporada 2022, período en el que reemplazaron las lámparas halógenas por luminarias LED al proyectar cuatro torres nuevas. Las mismas serán colocadas en los próximos días en cada esquina del estadio.
El valor lumínico alcanzado por estas reformas lo habilitan para jugar, pero no lo exime de una multa de 75.000 dólares por encuentro porque la iluminación debería ser mayor. La suma de dinero será descontada de los 3 millones de dólares que ingresarán a las arcas de la institución por clasificar a la fase de grupos del certamen continental.
Trasladar la localía a escenarios cercanos no evitaría el pago de la multa dado que los estadios de Colón y Unión de Santa Fe, o el Gigante de Arroyito de Rosario Central y el Coloso Marcelo Bielsa, el estadio de Newell’s, tampoco reúnen los parámetros exigidos por Conmebol. De esta manera tendría que oficiar de anfitrión en el Mario Kempes de Córdoba, o en los estadios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para no ser castigados económicamente.
El lunes la dirigencia de Patronato recibirá la visita de los veedores de Conmebol. Los directivos del ente regulador inspeccionarán las obras para determinar si la Comarca Rojinegra se transformará en sede del certamen continental. En barrio Villa Sarmiento son optimistas en superar la primera gran prueba que afrontarán en la Copa Libertadores.
Las gradas lucen impecables tras la mano de pintura que aportaron socios y fanáticos de la institución. Los arcos fueron colocados en la tarde del lunes. En el sector de plateas se exhiben las nuevas butacas plásticas, como exige Conmebol. Solo resta la aprobación del ente regulador para que, ese sueño alocado y lejano, se transforme en realidad. Para que el estadio Grella sea un escenario internacional.