"El caso es muy complejo", comenzó advirtiendo a UNO la abogada Valeria Rodríguez, que trabaja en la oficina de la mujer de la municipalidad de Gobernador Mansilla, para explicar lo que está sucediendo con la situación de la chica que fue grabada mientras gritaba en forma desesperada.
Miércoles clave en el caso del video que filmaron en Mansilla
La funcionaria municipal confirmó que la violencia intrafamiliar ocurre desde hace 20 años y resaltó que realizaron unas siete denuncias judiciales que nunca prosperaron.
Desde la Oficina de la Mujer insistieron con que la "violencia de género, psicológica y simbólica existe" más allá de que el padre, Horacio Cocooz un mansillense de 78 años, justifique que "las aisló de la sociedad con la intención de resguardarlas porque es un ambiente hostil en donde los persiguen".
En Mansilla todos saben que las tres hermanas Cocooz nunca estudiaron y fue el padre el que se encargó de la salud. "No tienen amigos y mucho menos parejas, mientras que el hermano estudió y ahora trabaja", recordó Rodríguez.
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La abogada puntualizó que en los últimos años "se nos cayeron los planes de acción y las estrategias luego de hacer las presentaciones por escrito a la Justicia". También reconoció que cuando "le hacen pericias de abusos (a las mujeres) siempre dieron negativas".
Luego de la intervención judicial, por el video que se viralizó en último fin de semana, las hermanas menores declararon que Cintia, una mujer que tiene cerca de 40 años, declararon que los gritos fueron a causa de una ataque de esquizofrenia.
El fiscal Samuel Rojkin deberá determinar cómo sigue adelante la investigación después que tenga en sus manos las pericias psiquiátricas que le realizarán este miércoles al padre de la familia y las tres hermanas