El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) es el principal organismo a nivel nacional que tiene por objetivo promover la ciencia y la tecnología en el país. Fundado en 1958, es un instituto autárquico y su trabajo tiene varios ejes, siendo los principales el otorgamiento de becas doctorales y posdoctorales para el desarrollo de investigaciones.
Conicet Entre Ríos: el backstage de la producción científica
Por Fedra Venturini
A lo largo del país funcionan 15 Centro Científicos Tecnológicos, 11 Centros de Investigaciones y Transferencia, un Centro de Investigación Multidisciplinario y más de 280 Institutos exclusivos del Conicet o de doble y triple dependencia con universidades nacionales, instituciones públicas y privadas. En la provincia de Entre Ríos funcionan cuatro sedes que tienen convenio con el Consejo y, a la vez, con la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) y la Universidad Nacional de Entre Ríos (Uner). Sumando todos los institutos que funcionan, son 232 los trabajadores que se dedican a la investigación o se desempeñan como becarios doctorales, posdoctorales, personal de apoyo, administrativos y trabajadores de mantenimiento.
De acuerdo al Convenio Colectivo de Trabajo General para la Administración Pública Nacional más reciente, publicado el 23 de noviembre de este año, el sueldo que percibe el escalafón más alto de investigación en diciembre (investigador Superior) es de 116.881,17 pesos; por su parte un investigador Principal gana 105.163,83 pesos; el investigador Independiente 94.209,51 pesos; el investigador adjunto 82.589,40 pesos y el investigador asistente 70.776,38 pesos.
¿En qué trabajan las distintas sedes de Conicet en Entre Ríos?
En la provincia de Entre Ríos, la sede más longeva es la del Centro de Investigación Científica y de Transferencia Tecnológica a la Producción (CICYTTP) que se fundó en 1995 con el objetivo de ser un espacio relevante en la provincia referido a las Ciencias Naturales. Allí se desarrollan investigaciones básicas y aplicadas en Ciencias Biológicas, Ciencias de la Tierra, del Agua y de la Atmósfera, Historia y Arqueología. Además, se elaboran investigaciones en Actuopalinología, Arqueología, Biología Celular y Microbiología, Ecología de la Vegetación, Ecología Animal, Entomología, Estudio de la Biología de Insectos, Geología de Neógeno-Cuaternario, Herpetología, Ornitología y Conservación, Palinoestratigrafía, Paleobotánica y Paleontología de Vertebrados. En total funcionan allí un total de 86 personas entre investigadores, becarios doctorales y posdoctorales, personal de apoyo y administrativos.
Por otro lado el Instituto de Investigación y Desarrollo en Bioingeniería y Bioinformática (IBB) fue el primer instituto de doble dependencia entre CONICET y UNER. Creado en 2017, trabajan allí 48 personas egresadas de carreras como Bioingeniería, licenciatura en Bioinformática, Ingeniería Mecánica, Ingeniería Electrónica, Química y licenciaturas en Ciencias Biológicas y Biotecnología. En el instituto se elaboran investigaciones dentro de cuatro campos: grupo de flujos complejos en Biomecánica, Bioingeniería y Biología; Laboratorio de Señales Dinámicas y No Lineales; Laboratorio de Microscopía Aplicada a Estudios Moleculares y Celulares y Grupo de Mecanobiología Celular.
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En tercer lugar se encuentra el Instituto de Estudios Sociales (INES), que nació en 2012 como un Centro de Investigación y Transferencia por cinco años y, finalmente, se concretó la formación del instituto como Unidad Ejecutora en 2017. Allí trabajan un total de 52 personas que estudian dentro de ocho líneas de las Ciencias Sociales y Humanas como: Desarrollo y Territorio; Historia Social y Economía de Entre Ríos entre los siglos XIX y XX; Políticas Públicas, Mercado de Trabajo y Transferencias Monetarias; TIC, Conocimiento y Cultura para la Inclusión Social; Etnografía y Procesos de Comunicación y Educación Popular; Pensamiento Sociopolítico Moderno y Contemporáneo; Educación, Políticas y Sociedad en Entre Ríos y Feminismos, Sexualidades y Estudios de Género.
El centro más reciente es el Instituto de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de Entre Ríos (ICTAER), que se conformó en mayo de 2020 y tiene dos sedes las localidades de Gualeguaychú y Concordia. Allí se abordan investigaciones sobre Producción de Alimentos, Tecnología de Alimentos; Tecnología e Ingeniería de Procesos; Biotecnología Industrial; Genética y Biología Molecular Aplicada a los Alimentos; Inocuidad Alimentaria; Aprovechamiento y agregado de valor de residuos agroindustriales; Agua, Efluentes y Medioambiente; Enfermedades transmitidas por alimentos; Alimentos funcionales y suplementos dietarios y salud poblacional. Actualmente se desempeñan allí un total de 46 personas.
Cómo funciona Conicet por dentro
Para conocer el sistema burocrático que rige en el Consejo, UNO dialogó con los titulares de las cuatro sedes en la provincia: la doctora Mariana Brea del CICYTTP; el doctor Gastón Schlotthauer del IBB; la doctora Eva Mara Petitti del INES y la doctora María Beatriz Gómez del ICTAER. Los directivos destacaron que el proceso para ingresar al sistema dentro de un equipo de investigación es extenso, muy competitivo y que requiere de mucho estudio y esfuerzo: "Hay que tener un muy buen promedio para ingresar a una beca", comentaron a UNO y detallaron: "Se debe empezar a tener contacto con los equipos de investigación desde el tercer o cuarto año de la carrera de grado y, cuando se está en vistas al egreso, iniciar con el desarrollo de un plan de trabajo. Por otro lado, también puede acercarse un laboratorio para ofrecer una beca o proyecto de investigación, donde hay que postularse como en cualquier trabajo".
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Para doctorarse en Conicet, el proceso dura cinco años mientras que una beca posdoctoral tiene una duración de tres años. Para ser aceptado por el sistema en esta dinámica, los investigadores remarcaron se debe contar con un gran número de antecedentes y publicaciones realizadas en distintas revistas científicas y que esto es evaluado por expertos en las distintas materias, además de que pasan por un concurso cuyo resultado es por orden de mérito y, también, cortado por el propio presupuesto. "Se pasa por un montón de instancias de evaluación y no hay nadie de la administración pública que interfiere en el proceso que es para ingresar a la planta permanente", observó la doctora Brea y agregó: "Cuando se es becario de Conicet estás en el aire y, con los años, se asciende por los distintos escalafones que conllevan un gran antecedente y un concurso público".
Además, anualmente, los becarios deben elevar al directorio un reporte para detallar los avances en las investigaciones. Esto también sucede para los investigadores que están en el escalafón más alto, pero cada dos años. "La reglamentación dice que, si desaprobamos dos informes correlativos, se cita al investigador a una junta donde existe la posibilidad de despido por falta de producción", comentó Brea.
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Por su parte, la doctora Petitti enfatizó en la formación que se realiza en el marco de recursos humanos y consiste en la formación y dirección de tesistas de grado. "En la rama de las Ciencias Sociales las exigencias de Conicet son las mismas, así como los antecedentes que se piden para ingresar. Todas las publicaciones y ponencias son evaluadas por pares. Estamos en constante evaluación y la institución es altamente meritocrática, ya que se exige un promedio alto para ingresar a las becas", detalló y apuntó: "Podemos estar de vacaciones, pero si un tesista o becario necesita la revisión nosotros leemos sus trabajos para que no pierdan sus becas".
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En otra línea, los investigadores comentaron a UNO que el trabajar el Conicet vuelve incompatible cualquier otra actividad que no sea la docencia universitaria, pero que esta debe ser por un límite de horas y que, si se sobrepasa este margen, se descuenta del sueldo. "Si la dedicación es superior a las diez horas, se descuenta del trabajo", observó la doctora Brea. Por su parte el titular del IBB comentó su situación particular: "Soy docente universitario y, en años anteriores, me sucedió que en el recibo de sueldo de Conicet me diga 'cero pesos' y sucede a muchos colegas. No obstante, las horas en el laboratorio o lugar de trabajo, así como los informes correspondientes, se deben cumplir".