Hay una situación penosa que no se soluciona en los últimos años, y esto es por exclusiva responsabilidad de los políticos que nos han gobernado. Dentro de los peores sectores que la pasan en el país, se encuentran los jubilados nacionales, sector verdaderamente castigado y que por lo que se ve, no hay intenciones de modificarlo en nada.
Jubilados, los condenados en el país a morir pobres
Por Javier Aragón
Trabajo. Será contralor la Subsecretaría de Salud, con la asistencia de la Defensoría del Adulto Mayor.
Da vergüenza y no alcanza con pedirles disculpas a nuestros adultos mayores, por lo mal que le están pasando. Siendo humillados, pisoteados y declarados institucionalmente por los sueldos que cobran: pobres de por vida.
Nos estamos acostumbrando a que cuánto peor la pasan algunos sectores en el país, más nos anestesiamos a avalar y justificar con el silencio lo que ocurre. Asco dan los lo que se suben a los discursos populares y demagógicos de hacer política barata con los jubilados.
Hacer anuncios pomposos para un aumento de 200 pesos por día, que significarían 6.000 pesos al mes, es patético. Pero así son nuestros gobernantes, a los que deberíamos invitar a vivir con el sueldo de un jubilado.
Algunos datos para romper el relato oficial que se está haciendo mucho por los jubilados nacionales: en octubre la canasta básica para los pasivos alcanzó los 151.478 pesos, según la medición que realiza en forma semestral la Defensoría de la Tercera Edad.
El que reflexionó sobre esto, fue el defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino. “Los datos actuales marcan que los jubilados viven en absoluta precariedad y miseria. Hay 6 millones de jubilados que cobran una mínima de 43.000 pesos y en el que el resto recibe un haber promedio de 65.000 pesos”.
¿Cómo hacen estas personas para llegar a los 151.000 pesos?
Semino dijo sobre la solución del gobierno para los jubilados de pagarles un bono. “El intento de mitigar el problema mediante el anuncio de bonos que son como monedas arrojadas a un pueblo hambriento no solamente son inútiles sino también contraproducentes. Son parches que resaltan el agujero que quieren ocultar. En un contexto en el que hacen falta más de tres jubilaciones mínimas para cubrir una canasta básica, el anuncio de un bono de 7000 pesos es insultante”.
¿Cómo hace un jubilado para enfrentar una inflación anual de un 100%, con este sueldo de hambre?.
Seguramente el Presidente de la Nación, la Vice, sus funcionarios nacionales o los legisladores tienen sueldos superiores al millón de pesos. Así es muy fácil hablar del otro, solidarizandose en sus problemas, pero no haciendo nada por el problema de fondo.
Se escuchó decir algo sobre gestos solidarios de los políticos, legisladores o funcionarios. Por decir, descontarles un 30% para destinarlos íntegramente a las jubilaciones. O lo mismo con los gastos en temas superfluos, como por ejemplo bajar el número de personas que deban ir en la comitiva a las Naciones Unidas?.
Por decir. ¿Era necesario llevar el peluquero de la Primera Dama, entre otras personas que no eran necesarias?
De acuerdo a los cálculos hechos por la defensoría, los jubilados podrían llegar a un reajuste anual de algo más del 60% pero con una inflación que se estima que va a llegar al 100%.
En los últimos cinco años, transcurrieron 19 trimestres de actualización de haberes. No obstante, en solo en cuatro ocasiones los haberes le ganaron a la inflación y en otros dos la igualaron.
En los años 50’, la Argentina se hizo muy fuerte en los social, con una clase media potente. Había un Peronismo que dignificó con derechos y propuso una distribución que permitía a los integrantes de una familia, poder trabajar, estudiar y llegar a jubilarse para disfrutar sus últimos años de vida.
Algo pasó en el medio, para que se dilapidara un modelo de inclusión.
Hoy vemos mucha saraza, humo con anuncios estridentes y vacíos. Aplausos de funcionarios, excitación mental, autos de lujos, custodias y una sobreactuación de personas que están en otra sintonía, muy lejos de padecer problemas, y de no saber que es no llegar a fin de mes, de no tener ni para comprar la medicación.
En una obligación del Estado y sus funcionarios revertir esto. Claro, hoy es más importante hablar de un fin de semana largo turístico, de la selección de fútbol, las figuritas, las Paso, de ampliar la Corte Suprema, en definitiva, tratar de ocultar la realidad. Muy perverso todo.