El Servicio de Oncología del Hospital Centenario de Gualeguaychú recibió una campana para que toquen los pacientes que culminan con sus sesiones de quimioterapia.
Oncología: el anhelado momento de hacer sonar la campana
“La campana fue donada al servicio, es una antigüedad que consiguieron”, comentó al respecto el Jefe del Servicio de Oncología Franco Ramello.
El médico detalló que “es para los pacientes que finalizan su tratamiento de quimioterapia, se hace en muchos lugares, tienen una campana para que el paciente cuando termina pase por ahí y la toque, es un reconocimiento para felicitarlo por lo que ha pasado, porque termina su tratamiento”.
“Se busca que el paciente sienta que es una etapa terminada y que se genere en el resto de la gente que está en el servicio que todo pasa, que uno puede atreverse a ponerle límite a la enfermedad transitando las etapas de la quimioterapia”, explicó Ramello, quien agregó que “esto hace participe al resto de los pacientes, que se suelen conocer, suelen estar juntos y charlar, son muchas horas que pasan sentados en los sillones y que uno termine su tratamiento da mucha alegría a todos, tanto a los que trabajamos como a los pacientes”.
“Es algo que tiene que estimular al que está pasando por esa situación, saber que el tratamiento puede tener una finalización, ese es el motivo de la campana, si bien es algo que parece intrascendente para el paciente, genera un alivio, una sensación de gratitud y de felicidad muy importante”, concluyó Ramello.
Vale destacar también el bello mensaje que tiene: “En toda oscuridad hay una luz, en cada lucha hay una solución, en toda fe hay una esperanza. ¡Lo lograste, felicidades!”
Campanas de esperanza
En Paraná, se lleva adelante desde 2022 la acción "Campanas de Esperanza" en la estación del Ferrocarril. Allí, niños, jóvenes y adultos hacer sonar la campana de la estación para anunciar el fin de su tratamiento contra el cáncer.
De esta manera, más allá de la felicidad del paciente, se promueve la educación en salud, generando un espacio para concientizar sobre la esperanza en los tratamientos contra el cáncer, la importancia de tener hábitos saludables y la realización de controles para la detección precoz.
Las cifras del cáncer en el mundo revelan un gran aumento en su diagnóstico, sobre todo en personas jóvenes. Según un amplio estudio científico publicado en BMJ Oncology realizado por un consorcio internacional de investigadores de Estados Unidos, Reino Unido, China y Suecia, los diagnósticos de cáncer en menores de 50 años aumentaron 79% desde 1990 a nivel global.
Según las conclusiones del estudio, las personas que hoy tienen 40 años representan uno de los grupos más vulnerables ante este cambio en la expansión de las enfermedades oncológicas. El cáncer de mama lideró el número de nuevos casos y muertes en el grupo de menores de 50 años, mientras que los cánceres de tráquea y próstata mostraron un incremento más rápido, con crecimientos anuales estimados de 2,28 % y 2,23 % respectivamente. En contraste, el cáncer de hígado ha experimentado una disminución del 2,88 % anual.
Si bien este amplio estudio internacional reveló que el riesgo de cáncer temprano aumentó en cada generación desde la década del 90 y los científicos investigan las posibles causas que van desde estilos de vida sedentarios hasta la exposición a la contaminación ambiental, la incidencia de la mala alimentación y obesidad, los expertos coinciden en que estas razones no explican completamente la situación de pacientes jóvenes y saludables.
Por eso el símbolo de hacer sonar las campanas no sólo anuncia el fin del tratamiento para el paciente, sino que también pregona la oportunidad de seguir adelante con las campañas de concientización sobre la enfermedad.