Se desarrolló ayer la jornada inicial del Primer Congreso Entrerriano de Oncología Clínica, en el Centro de Convenciones de Paraná que reunió a prestigiosos disertantes y especialistas de la región que dieron cuenta de la actualidad en tratamientos, investigación y detección de casos de cáncer. Del encuentro, que fue organizado por la Fundación Centro de Medicina Nuclear y Molecular Entre Ríos (Cemener), participó el doctor Matías Chacón, jefe de oncología del Instituto Alexander Fleming de Buenos Aires.
Cáncer: el doctor Matías Chacón y la actualidad oncológica
Por Dina Puntín
Dina Puntin
Cáncer. “No hay milagros, hay buenas prácticas y hay que adherirse a ellas para que el mejor tratamiento llegue a cada uno de los pacientes”.
En diálogo con UNO, el médico destacó la importancia de la realización de este encuentro provincial y sostuvo la necesidad de difundir hábitos saludables para evitar el diagnóstico de tumores.
“La oncología es la ciencia que estudia el cáncer en pro del beneficio del paciente. Uno es paciente en Paraná, en Buenos Aires, en Posadas y necesitás siempre la mejor referencia posible para que se atienda de la mejor manera. La distribución, la difusión de información es fundamental para todos los rincones del país. El médico es un agente de diseminación de información, los medios también son agentes sanitarios porque trasladan información. Y la información más sencilla que uno puede dar para evitar o disminuir las complicaciones que un tumor puede provocar es vida saludable, o sea, no comer excesivamente, no fumar, no tomar alcohol, no tener hábitos higiénicos inapropiados, cuidarse en las relaciones sexuales con preservativo, vacunar a los chicos. El mejor logro para que haya un mundo con menos cáncer es tomar esas medidas saludables”, indicó.
También hizo referencia a las cifras del cáncer: “ Si bien es cierto que la mamografía disminuye notoriamente la mortalidad por cáncer de mama y la colonoscopía disminuye la aparición de los tumores de colon, la medida más fuerte es no fumar por ejemplo. En el mundo hay aproximadamente 20 millones de personas con cáncer anual, de las cuales 2 millones y medio son personas con cáncer de pulmón, 2 millones con cáncer de mama, todos esos números si se piensan a gran escala parecen un montón, obviamente la persona que tiene cáncer de pulmón en la casa altera todo el ritmo de vida de su familia pero con pequeñas medidas, de difusión, toma de conciencia, la línea gubernamental que debería ser muy coherente a lo largo de las gestiones independientemente de quien está arriba o abajo, permitiría que toda esta política sanitaria cambie un poco la historia de esta enfermedad que es el cáncer, que para muchos es mala palabra y para otros no. De cada 3 o 4 personas, una va a desarrollar un cáncer, es una enfermedad frecuente”.
Ante la consulta sobre el acceso a los tratamientos, el especialista señaló: “La persona que se trata en Paraná como los médicos que lo hacen, tienen las mismas herramientas que en París, Buenos Aires o Corrientes. Es cierto que en el acceso a los medicamentos hay disparidades, inequidades como en todo el planeta. Argentina dentro de Sudamérica es un país privilegiado en lo que hace a acceso. Países como Brasil y Chile, que no deberían tener este problema, tienen problemas de acceso. Sobre nuestro país, creo que hay una mala distribución de las cosas, pero con la educación y diseminación de la información esas barreras se tienen que achatar”.
Al respecto, indicó la necesidad de que el enfermo maneje buena información. “El paciente tiene que estar empoderado, no fanatizado. Empoderado, consciente, saber hasta dónde se puede llegar. Hacer las consultas pertinentes, pedirle al médico. A veces todos tenemos nuestras limitaciones de que hacer y necesitamos un tercero. Con las provincias, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Misiones, hemos logrado mucha comunicación, hacemos Comité Federal, discutimos casos ad honorem de forma semanal para que todos tengamos el mismo acceso, el acceso a la buena práctica. No hay milagros, hay buenas prácticas y hay que adherirse a ellas para que el mejor tratamiento llegue a cada uno de los pacientes”.
Párrafo aparte para la burocracia en las prestaciones. Ante la pregunta, el doctor Chacón manifestó: “En el acceso creo que las barreras que tenemos son por un sistema difícil, hiper fragmentado, muy fragmentado -subrayó- desde el punto de vista de obras sociales provinciales, sindicales, prepagas, hospital público. Si hay una buena línea política a lo largo del tiempo Argentina va a llegar equitativamente a cada rincón. Necesitamos todas las patas de la mesa para poder sentarnos y discutir y generar el ámbito que es darle la mejor calidad de asistencia a los pacientes”.
Vida saludable
“La gente cuando habla de acceso busca el mejor medicamento, el último y no es así. Lo primero es la prevención y si uno cumpliera todo eso (vida salubale, bajar de peso, no fumar, hacer ejercicio), nos ahorraríamos el 40% de los tumores que se diagnostican anualmente, en el mundo representan 7 millones menos de personas con cáncer. El segundo paso es tener buenos patólogos, buenos cirujanos, buenos mamógrafos y con eso llegás a tener menos enfermedad avanzada. Por lo tanto el medicamento de alto costo -que es en definitiva el problema de siempre- es una consecuencia ulterior, es lo último, hay mucho para trabajar antes de llegar a una droga de alto costo. La ciencia avanza a pasos agigantados. ¿De eso estamos lejos? Sí estamos lejos, pero la investigación en Argentina también se desarrolla, por eso hay que difundir prevención, buena educación médica, educación a la gente, canales de televisión, radio, diarios difundiendo información. Hay que pedir espacio para que la gente entienda. Así como se ve que el cáncer de pulmón bajó porque la gente fuma menos, sencillamente así hay que lograrlo en cada rubro. Hoy en día, así como antes fue el cigarrillo, el gran problema es el alcohol, es un agente químico, es un hacedor de cáncer en gente arriba de los 50 años”, explicó.
Además, volvió a remarcar la necesidad de hacer los estudios de control. “El cáncer de cuello uterino que es un gran flagelo dentro de Latinoamérica, en Argentina dentro de las zonas más pobres, pero no pobres de recursos sino de educación. Si la gente se hace el papanicolau, se controla, se vacuna (plan obligatorio desde el año 2011), todo disminuye la mortalidad, la incidencia, las complicaciones que el cuello uterino trae. Es muy importante juntar todas las variables, centrándose en la educación. Después los grupos de pacientes pelean por el medicamento de alto costo, pero hay que pelear porque la universidad forme cada vez mejores médicos” y añadió: “La prevención primaria es ‘no hay enfermos ni enfermedades’. Vos hacés todas las medidas, no fumes y no va haber cáncer de pulmón; cuídense, usen preservativo, vacúnese y no tendremos cáncer de cuello de útero o bajará notoriamente. Esto es gratuito, es información. Prevención secundaria es hacer un test que permita acceder más tempranamente a un diagnóstico. Por ejemplo la mamografía, cuando uno hace este estudio correctamente se detectan tumores más chicos que difícilmente le traigan consecuencias a los pacientes. La colonoscopía es el método por excelencia de prevención secundaria donde sacás el pólipo del intestino, no va haber cáncer, ni siquiera va aparecer. El papanicolau es claramente una medida de prevención porque detectamos lesiones primarias que no son cáncer, vemos alteraciones en el cuello uterino y evitamos terminar en radiación, quimioterapia, cirugía. La fortaleza de un buen sistema de salud es optimizar esto”.
Cáncer de mama en primer lugar
El profesional esgrimió los datos del cáncer en Argentina: “Punto uno prevención y punto dos tener datos del país sobre cáncer y Argentina no tiene datos, nos ven desde afuera y de afuera toman siete registros provinciales, ni siquiera Buenos Aires está incluido y estiman el número de cáncer en el país anualmente. Aproximadamente hay 130.000 casos nuevos al año en Argentina, esos ven desde afuera, son estimaciones. El tumor más frecuente es el cáncer de mama -aún con datos de hombre y mujeres- 25.000 casos; el segundo es cáncer de colon, 15.000 casos; el tercero cáncer de pulmón y cáncer de próstata, 13.000 casos, cáncer de cuello uterino, 5.000 casos. Estas son cifras anuales. Para que estos números bajen hay que insistir en la educación, conciencia popular, claramente bajar línea desde los gobiernos para poder establecer esto: ‘el pueblo más sano es el que no se enferma, no el que tiene acceso al último medicamento’.
Sobre su exposición sobre sarcoma y melanoma expresó: "Son patologías raras, los sarcomas es el 1% de los tumores, el cáncer de mama es el 25%, pero para el paciente que tiene un sarcoma es el 100%, son patologías complejas, cada vez más complejas genéticamente. Son enfermedades que no se pueden prevenir, a diferencia de los tumores más frecuentes que ya mencioné que sí se previenen; los menos frecuentes no. En esto el conocimiento evolucionó mucho, la genética mejoró, pero necesitamos muy buenos patólogos que le pongan nombre y apellido para que el médico haga lo correcto”.