Jey Mammón retornó al ojo público a horas de iniciarse un juicio civil donde el ex conductor de Morfi demandó a Lucas Benvenuto, Yanina Latorre, Ángel de Brito, Florencia de la V y otros periodistas de espectáculos por cifras millonarias en el marco de calumnias e injurias.
Jey Mammón rompió el silencio antes del juicio por calumnias
Desde que retornó de España, país al que escapó tras estallar el escándalo que inició la detención de Marcelo Corazza, se dedicó a trabajar con sus abogados en las pruebas del vínculo que mantuvo con Benvenuto. Según adelantó el músico, se recolectaron mensajes, fotos y testimonios.
"Cuestionaban todo, el estado de clonazepam, todo. La verdad fueron distintos estados y también algunos de vulnerabilidad. En algún momento tomaba pastillas porque fue como si me hubiesen dado una patada en la cabeza, pero no una normal, una patada de destrucción", dijo a Infobae. "En los programas analizaban mis gestos, como van a hacer ahora en esta entrevista, ¿se puede analizar a una persona? Hay programas de televisión que expusieron la denuncia falsa que me hicieron y eso no se hace. Con detalles escabrosos, tremendos, horribles. Todo por un puto punto de rating".
En este sentido el conductor resaltó que se sintió cancelado por un gran número de personas y que esto le provocó problemas en su salud mental y que aún, en ciertos ámbitos, continúa estándolo. Sin embargo, expresó: "No hay una persona que me haya dicho nada negativo desde que empezó todo esto hasta el día de hoy. Si yo hago una obra de teatro hoy, tengo la sensación de que la gente vendría a verme".
LEER MÁS: Jey Mammon compartió el último audio con Lucas Benvenuto
Como era de esperarse, se le consultó por su relación con Lucas Benvenuto y relató: "Él vino a una fiesta, tenía 16 años cuando lo conocí y lo sé porque primero le pregunté. Lo conozco y lo conocí durante muchos años". Además, aseguró que un chico que asistió con Lucas a aquella fiesta atestiguó en su favor y su declaración fue otorgada frente a un escribano y que será presentado en el juicio.
Asimismo, respecto a cómo lleva su día a día tras las denuncias en su contra, manifestó: "Cada vez que me levanto es una incertidumbre total. No estoy enojado, pero si fueran conscientes de lo que está pasando, de lo que están haciendo e hicieron, entenderían de lo que estoy hablando. Estoy en una que no se la deseo a nadie. Es como estar muerto en vida".