La Liga Argentina entra en la etapa de definición y Echagüe tiene un cierre desgastante con cuatro partidos en cinco días que implican 2.600 kilómetros de recorrido. Una locura. ¿Cómo se puede afrontar una exigencia semejante? ¿De qué manera se prepara cada juego? ¿Puede resistir el físico de un deportista de alto rendimiento una seguidilla de esta magnitud con tantos viajes en el medio? ¿Cuáles son las consecuencias?
Echagüe tiene cuatro juegos en cinco días y 2.600 kilómetros
Prensa Echagüe
Echagüe tiene cuatro juegos en cinco días y 2.600 kilómetros
Varios interrogantes surgen a partir de una competencia evidentemente mal organizada, independientemente de las ventajas económicas que implican hacer todo el recorrido de un tiro.
Echagüe comenzará el viaje el lunes 20, cuando visite a Salta Basket. Este primer recorrido implica un viaje de 1.062 kilómetros. Al otro día del partido deberá recorrer los 307 kilómetros que unen la capital salteña con San Miguel de Tucumán para enfrentar a Tucumán Básquet.
El miércoles 22 tendrá un día de “descanso” y luego viajará a Santiago del Estero, donde enfrentará a Independiente. Ese trayecto es de 163 kilómetros. Tras el partido ante el equipo santiagueño viajará a Catamarca, donde el viernes 24 se medirá con Montmartre.
El sábado 25 regresará a Paraná, donde tendrá 808 kilómetros. Sin tener en cuenta los traslados internos (visita a los estadios para la sesión de tiros entre otros) recorrerá 2.573 kilómetros, por lo que en total recorrerá cerca de 2.600 kilómetros.
Una locura. Descontando los 800 km que unen Catamarca con Paraná, el plantel dirigido por jugará el último partido con 1.800 kilómetros a cuestas.
Todo un sacrificio para cualquier deportista, y más aún cuando su rival lo espera con otro descanso. Si bien cada vez que un equipo juega de local tiene esa ventaja, en este caso la situación es completamente distinta. No es lo mismo viajar y jugar un partido o a lo sumo dos que hacerlo cada 24 horas con semejante recorrido.
Luego de esa gira Echagüe cerrará de local ante Colón el viernes 31. “Trato de no pensar mucho, porque creo que el secreto va a ser ir partido a partido en el sentido de que debemos renovar las energías en esas entradas en calor y luego decir bueno... ya estamos acá, el fixture es así y ya lo sabemos. Nos vamos a ir preparando de la cabeza y desde lo físico y nosotros tenemos que jugar a ganar esos partidos, obviamente va a ser difícil porque no solamente son los partidos, sino los viajes. Porque entre partido viajás. Pero bueno, está hecho así, es el cierre de la fase regular y tenemos que ponernos fuertes de la cabeza”, dijo el capitán y referente Lisandro Ruiz Moreno a Ovación luego de la victoria del lunes ante Ceres.
Más de allá de las estrategias para encarar este desenlace desde el sentido común es inhumano. ¿Qué secuelas le pueden quedar al físico del jugador en caso de salir ileso de la semana? ¿Cuál es el impacto que puede ocasionar este desgaste sumado a la carga emocional que implica jugar por definir su posición en la tabla de la Conferencia Norte?
Porque no es lo mismo encarar una gira de estas características al principio de la temporada o mitad de la fase regular.
Echagüe tendrá un partido la semana previa ante Montmartre de local. Será el jueves 16 y luego finalizará el 31 de local ante Colón.
El cuerpo técnico se las tendrá que ingeniar para dosificar las energías y tratar de sentir el menor impacto posible.