Vélez y Banfield se enfrentan en el Estadio José Amalfitani, por la décima jornada de la zona A de la Copa de la Liga Profesional. El conjunto de Liniers intenta obtener otro triunfo en su casa frente al debilitado Taladro en un duelo clave por la permanencia.
Banfield le ganó un partido clave a Vélez en Liniers
El conjunto de Sebastián Méndez tuvo un arranque a pleno merodeando insistentemente el área de Facundo Cambeses y prácticamente impidiendo que los de Julio Falcioni llegaran a pisar los tres cuartos de cancha. En esos momentos, Elías Gómez metió un cabezazo en el travesaño, pero con el correr del trámite logró emparejar la visita e incluso estar más cerca de abrir el marcador.
El Taladro justificó el éxito por su reacción en el segundo tiempo. Salió a jugarlo con más autoridad e intensidad en ataque. Merodeó mucho más seguido el área de Chila Gómez, se agrupó y tuvo más elaboración. Encima, algunos titubeos de Velez en el fondo lo ayudaron al Taladro.
Poco y nada habían entregado en el período inicial. Más cerca del nada que del poco. Un mejor engranaje tuvo Vélez porque se hizo cargo del protagonismo y adoptó una postura ambiciosa. Avanzó por los costados, mandó en el medio. Pero las intenciones morían en las inmediaciones de Cambeses. Apenas tuvo una muy clara el cabezazo de Elías Gómez que el arquero desvió. El remate dio en el travesaño y se fue.
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Poco a poco el Fortín empezó a quedarse sin argumentos. Esa mayor posesión era cada vez más inofensiva. Y no le bastaba con algunas buenas apariciones de Aquino por izquierda. La visita, más allá de su escasa tenencia, tuvo algunas llegadas. Una obligó a Chila Gómez a lanzarse abajo.
El balón les duraba poco a los dos. Iban de tres cuartos a tres cuartos y ahí se apagaban. Sin buenas secuencias de pases, carentes de sorpresas, de cambio de ritmo, de variantes. No había ideas, sí más concentración para la destrucción de juego que la construcción. El tedio predominaba nó en el Amalfitani. Pero Rivera tenía guardada una joya en el botín derecho. Tuvo que ingresar él para quebrar el cero y brindarle un triunfazo a Banfield.