Este viernes 17 de febrero, a las 20, la parroquia Santa Teresita de Paraná invita a la misa de acción de gracias por los 91 años del padre Agustín Kaul. "Solo podemos decir gracias a la vida porque nos regaló esta gran ministro de Dios", destacaron desde la comunidad.
Paraná: el padre Agustín Kaul celebra sus 91 años
Para hoy está previsto que el sacerdote reciba centenares de cartas y dibujos con saludos especiales que los niños prepararon para él. Pero también en las redes sociales de la parroquia las salutaciones se multiplicaron, entre recuerdos y buenos deseos.
"Mi querido Padre. Me bautizó, me dió mi primera comunión y me casó!!! Felices 91 años!!!!", escribieron en el muro de Facebook.
"Feliz cumple padre Agustín, que Dios lo colme de bendiciones, gracias por su ejemplo y servicio", indicó otro saludo.
"Gracias padre Agustín por tantos años entregados a la Iglesia... Feliz cumpleaños...rezo por usted".
"Muchas felicidades querido Padre Agustín!!! Dios te colme de bendiciones en este día tan especial para ti y para todos los que te admiramos y apreciamos. Que nuestra Madre María y Santa Teresita te sigan protegiendo infinitamente. Que cumplas muy feliz tus jóvenes 91 años!!! Vamos por más, Dios mediante".
Como ya informó UNO, el padre Kaul lleva 66 años de sacerdote, de los cuales 55 vivió junto a la comunidad de Santa Teresita de Paraná.
Fue ordenado presbítero el 22 de diciembre de 1956 y ofició su primera misa en Aldea Santa María, el 28 de diciembre del mismo año.
Como destinos pastorales, la Iglesia le encomendó en sus comienzos la comunidad Santa Rosa de Lima, en Villaguay; de 1957 a 1959.
Luego, fue párroco en la Basílica Nuestra Señora del Carmen de Nogoyá, desde 1960 hasta 1966.
En 1967, y hasta mediados de 1985, fue destinado a la parroquia Santa Teresita en Paraná. También fue rector del Seminario Arquidiocesano de Paraná, hasta enero de 1986.
En febrero de 1986 fue nombrado Párroco de la Catedral Metropolitana de Paraná, y allí ejerció su ministerio hasta el año 2000.
También fue profesor en el Seminario, y en la Universidad Teresa de Ávila. El 26 agosto del año 2000, nuevamente, Santa Teresita lo trajo a su gente. Y desde entonces aquí sigue ejerciendo su paternidad sacerdotal, ya en el silencio y la oración.
Desde el principio del ministerio, su lema fue creer en el amor de Dios. Sentirse amado por Él, tener fe, y apostar a ese gran amor, fueron los fundamentos de su vida sacerdotal, vida de gracia y bendición para las comunidades, los fieles y los pastores con los que caminó toda ésta vida, y lo sigue haciendo también hoy.