Tras unos días con temperaturas atípicas para el otoño, con máximas que rondan los 27°, la semana que viene llegará el frío a la región, según anuncia el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), con mínimas que oscilarán entre los 2° y los 5° desde el domingo. Se trata de una noticia alentadora para los comerciantes del rubro textil, que se abastecieron para esta época del año con camperas y ropa de abrigo, pero vendieron pocos de estos productos en estos tiempos.
Negocios esperan el frío para un repunte en venta de abrigos
Por Vanesa Erbes
Esta semana, mientras tanto, los percheros cargados de sacos, pulóvers y camperas conviven en los estantes con las remeras mangas cortas, las camisas y camisolas y hasta con shorts y bermudas, ya que son las prendas que están teniendo mayor demanda con este “mini primavera” en pleno mes de junio.
Si bien hay algo de movimiento, vender abrigos, sin embargo, es lo que están esperando los propietarios de los negocios del sector, ya que hicieron una inversión importante debido a que son productos que cuestan más y lo óptimo es poder rotar esta mercadería.
Sobre este punto, Eduardo, empleado de una tienda de la Peatonal San Martín, comentó a UNO: “Este año viene mucho la campera inflable pero también la parca con abrigo. Depende de los materiales, tenemos camperas desde los 15.000 pesos en adelante, y vienen muchas prendas importadas que están arriba de los 30.000 pesos. Hay cosas de abrigo para pleno invierno entre 25.000 y 40.000 pesos. Existe una notable diferencia de precios entre lo que es esta temporada y la anterior”.
Frente a la escasa demanda de estos artículos, confió: “Estamos en un momento complicado, esperando que llegue el frío de una vez, lo estamos esperando, porque recién ahí aparecen las ventas del invierno. Ahora estamos vendiendo más remeras que cosas de abrigo”.
A su vez, indicó que hay ropa de verano que suelen guardar con el cambio de temporada, pero este año tuvieron que dejarla en los estantes para la venta: “Por ahí hay cosas que habitualmente las guardamos, pero todavía no lo hemos hecho, porque sigue haciendo calor y viene gente a buscar shorts, bermudas, y ni hablar prendas de mangas cortas”, aseveró.
Por su parte Rocío, propietaria de una tienda de calle Almafuerte contó que en su caso, al estar “tan caras las camperas”, optó por traer otras cosas esta temporada, teniendo en cuenta la demanda para asegurarse ventas: “Hay aumentos todos los meses, y si bien por ahí son 500 pesos en una prenda, todo suma. Justo viajé y camperas y abrigo no traje, porque están muy caras y cuando hizo un poquito de frío tiempo atrás vendí sólo dos. Traje sobre todo suétercitos y pantalones sastreros, que los estoy vendiendo re bien”.
“Lo que es abrigo grueso ha salido, pero no es algo que vienen a buscar todo el tiempo. Y mientras no haga frío, hoy los comerciantes lo estamos padeciendo, porque deberíamos tener de todo un poco”, añadió.
En este contexto, evaluó: “Ahora vinieron a buscar cosas livianitas. A mí me favorece, porque dentro de todo trabajo cosas ´tranquis´, como los suéter de hilo o lanilla y con esto me ha ido bien. Hace un par de semanas vendí lindo y eso por ahí hace que repunte un poco. Parece que recién para el lunes se anuncian 2° grados y después nos queda julio únicamente para vender lo que es de invierno, porque en agosto ya llega el cambio de temporada y va a ser más complicado que la gente busque cosas con abrigo”.
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Iván Nani, encargado de una popular tienda para la familia situada en la Peatonal, coincidió: “En lo que son prendas de abrigo no se está vendiendo lo que esperamos”.
Asimismo, manifestó: “Estamos aguardando que el fin de semana haya temperaturas mucho más bajas y que repunte un poco. Creemos que eso va a pasar, porque además del cambio de tiempo estamos en época de cobro y falta poco para el Día del Padre”.
“Esperemos que venga definitivamente el frío, porque sino la gente no sale a comprar ropa de abrigo”, evaluó, y comentó: “En nuestro caso, cosas de verano, de mangas cortas puntualmente, no tenemos desde que empezó esta nueva temporada; a lo sumo hay solo camisas, pero son de mangas largas. Todo lo que hay es de invierno”.
De acuerdo a lo que mencionó, las camperas de damas más económicas en el local a su cargo cuestan actualmente desde 20.000 pesos en adelante, y las más baratas de hombres, que son de nylon y están en oferta de cara al Día del Padre, están a 15.500 pesos. “En ese precio arrancan, y hay valores de ahí para arriba”, aclaró.
Precios en alza
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), Prendas de vestir y calzado fue el rubro que más aumentó en abril: alcanzó un 10,8% y acumulan incrementos que suman 118% en 12 meses.
Ante esta tendencia, Rocío Baso mencionó que cada vez es más dificultoso reponer mercadería debido a los aumentos de precios: “A los comerciantes nos está costando mucho esta situación. La verdad es que vendo bien, pero nunca alcanza. Cuando necesitás comprar en los proveedores, se te va la plata a dos manos”.
“Hubo un aumento del 20% al principio de la temporada y después sigue subiendo todo, se están yendo muy altos los precios”, dijo sobre este tema, y precisó: “Las remeritas hoy no bajan de 5.000 pesos, los suéteres están de 6.000 para arriba y una babucha común plástica está 10.000 pesos. Fui a reponer prendas deportivas y entre 14 prendas gasté 110.000 pesos. Para reponer algo se precisan entre 60.000 y 100.000 pesos y no sabés de dónde sacar plata para hacerlo”.
“Muchos piensan que nuestro trabajo es fácil, que es solo estar detrás del mostrador, pero es un gran sacrificio, hay que viajar, buscar precios. Hoy está bastante difícil todo”, concluyó.