El satélite Concorsat, diseñado por los estudiantes de las escuelas secundarias Renacer y San Roque González de Santa Cruz de la ciudad de Concordia, fue uno de los proyectos ganadores de la segunda edición de CANSAT Argentina, la iniciativa que propone a estudiantes de colegios secundarios de todo el país construir una carga útil cuyo tamaño no supere el de una lata de gaseosa y lanzarla en un cohete (de allí, el término CAN -lata- y SAT -satélite-, por sus siglas en inglés).
Concorsat: un satélite que unió a dos escuelas de Concordia
Por Dina Puntín
La competencia es organizada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MINCyT) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE). De 490 trabajos que se presentaron primero se realizó una selección de 30 equipos y posteriormente sólo cinco, entre ellos el satélite creado por los estudiantes concordienses que representará a la provincia de Entre Ríos.
Diario UNO dialogó con el profesor Juan Ignacio Garabuau, de la cátedra Disciplinas Industriales en la escuela Roque González de Santa Cruz y también Ingeniero electricista, quien describió el momento de recibir la noticia tan esperada.
"En el día de ayer (por el martes) se recibió un mensaje del Jurado de CONAE que pedía contar nuevamente la misión secundaria de todos los equipos. Se los pasé a los chicos para que lo lean y preparen algo nuevamente para convencerlos de que nosotros teníamos que probar la misión en Córdoba. Y así fue, uno de los jurados les preguntó de que trataba la misión secundaria (hace referencia a una problemática ambiental de la zona y los chicos eligieron el análisis de la contaminación acústica en el Parque San Carlos) y qué mejoras se le podía hacer. Se le respondió al jurado y luego una de las responsables de CONAE tomó la palabra. Les dijo que la misión era buena y les preguntó si les gustaría probar esa misión en el Centro Espacial de Córdoba. Al principio los chicos no cayeron que los habían seleccionados y les reiteró la pregunta, recién ahí entendieron que eran los nuevos finalistas de esta edición CANSAT 2023", detalló el docente.
Al describir las sensaciones de los estudiantes de ambos institutos secundarios, expresó: "Los alumnos están muy felices, esto es una alegría total, ver su trabajo valorado y que todo el esfuerzo dio sus frutos".
También hizo referencia a la necesidad de contar con apoyo económico para distintos gastos que tienen que ver con la estadía del equipo. "Tenemos en parte el viaje pago que es el premio, pero se necesitaría ayuda para distintos gastos de la estadía y otros fines".
Cabe recordar que el proyecto Concorsat fue Declarado de Interés por el Concejo Deliberante de Concordia que valoró "el trabajo en equipo, la integración de dos instituciones donde cada uno aporta sus ideas y trabajan con el otro potenciando sus talentos".
Sobre lo que viene, la posibilidad de viajar a Córdoba, al Centro Espacial Teófilo Tabanera de la CONAE para lanzar sus cargas útiles, el profesor indicó a UNO: "Ya tenemos todo ensayado para el despegue, quienes serán los encargados de colocar el satélite, de controlar los datos en la base terrena y de realizar el chequeo de las distintas secuencias que se realizan para no olvidar ningún detalle. Solo resta esperar que la misión funcione correctamente". En ese marco, realizarán distintas pruebas y mediciones, acompañados por profesionales de CANSAT Argentina y de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN).
Todo sobre el Concorsat
En su página web los estudiantes hacen referencia a su proyecto: "ConcorSat es un equipo que participa en la competencia Cansat 2023, está conformado por estudiantes de dos escuelas de Concordia, Entre Ríos - Esc. D-205 San Roque González de Santa Cruz y Esc. D-244 Renacer Secundario".
También hacen hincapié en el surgimiento del proyecto. "La idea del equipo surgió a partir del profesor de Física de la Escuela San Roque Gonzalez, Igancio Nacho Garabuau, quien nos habló sobre este proyecto. Debido a que éramos pocos interesados para conformar un equipo de una sola escuela, decidimos unirnos con otro grupo de estudiantes de la escuela Renacer Secundario, quienes ya tenían experiencia por su participación en la edición 2022 del concurso CANSAT. De esta colaboración nació el proyecto ConcorSat, cuyo nombre hace referencia a nuestra ciudad".
Los integrantes del equipo y sus roles son los siguientes: Vladimir Chury (Electrónica); Benjamin Kreizer (Prensa y difusión), Giuseppe Smitarello (Programación), Magalí Ferreyra (Validación), Luciano Madinier (Estructura), Oziel Hermosid (Sistema de descenso y recuperación). Los profesores guía del equipo son Ignacio Garabuau, Darío León Saleme y Martín Kober.
El objetivo de la competencia es contribuir al desarrollo de habilidades tecnológicas y a la promoción de una cultura científica e innovadora, ampliando la base de futuros profesionales y fortaleciendo los medios que aseguren la sostenibilidad del sector espacial en la Argentina, con un criterio federal.
El año pasado, este concurso fue organizado por primera vez en la Argentina, por el MINCyT y la CONAE, con la participación de la Universidad Nacional Tecnológica (UTN). CANSAT convocó más de 1.400 equipos de colegios secundarios de todo el país, entre sus dos ediciones –totalizando 7.000 alumnas y alumnos– que recibieron capacitaciones por parte de especialistas, a fin de adquirir los conocimientos, las herramientas y los materiales necesarios para llevar adelante el desarrollo del proyecto.
Este año los equipos seleccionados fueron: “ConcorSat”, de las escuelas San Roque González de Santa Cruz y Renacer, de Concordia, Entre Ríos; “Cóndor salvaje”, del Instituto Técnico de Aguilares, de Concepción, Tucumán; “HYPERION”, del Colegio León XIII de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; “Novationes”, del Colegio Nacional de Monserrat, de Córdoba capital; y “Roldán 2”, de la Escuela de Educación Técnico Profesional Nº 643 “Granaderos de San Lorenzo”, de la localidad de Roldán, Santa Fe.
Cada uno de estos equipos probará las misiones secundarias que eligieron, entre las que se encuentran: medir los sonidos ambientales que pueden afectar la salud y el bienestar humano, así como al medioambiente; evaluar regiones incineradas de campos, que mejoren el manejo de cultivos; estimar los índices de contaminación lumínica y atmosférica producida por el tránsito vehicular; y estimar los índices de microplásticos en el aire. Todas ellas están relacionadas con las principales actividades que se llevan a cabo en sus localidades.