A fines de 2016, la comuna de Paraná presentó a la Nación un proyecto para urbanizar gran parte de la zona suroeste. Son 400 hectáreas, las que pertenecían al Ejército y de las cuales se pueden trabajar unas 330. Cada gobierno, desde hace años presentó sus iniciativas. Se construyó un hospital a medias, 31 edificios se levantan en la actualidad, se dijo que la Universidad Autónoma de Entre Ríos tiene su campus y hasta el Club Paraná inauguró el suyo con un acto. También se hizo un centro contra las adicciones que quedó inconcluso. Todo sobre tierras que aún no pertenecen a la comuna, y al menos así lo explicaron desde la Municipalidad. Mientras, hay vecinos que esperan por casas sociales y hasta una escuela. Asimismo hay grandes sectores que están ocupados por viviendas precarias y hasta proyectos privados que también quieren meter la cuchara.
Hay 330 hectáreas a urbanizar, en disputa y flojas de papeles
Desde la comuna esperan que la Nación entregue terrenos que pertenecían al Ejército. Hay zonas ocupadas y obras sin documentación clara. Barrios aledaños no tienen servicios y en el Gaucho insisten con la necesidad de una escuela
4 de agosto 2017 · 08:39hs
El fin de semana UNO dio cuenta de la intrusión de grandes terrenos frente a los barrios Padre Kolbe y Gaucho Rivero. Los mismos pertenecían al Ejército. En 2014 la comuna había prometido 1.000 viviendas por etapas, mobiliarios y una escuela. Nada de eso se hizo.
Tiempo atrás también se conoció que del Centro Preventivo Local de Adicciones (Cepla), frente a Anacleto Medina Sur, solo queda la fachada y desde lo alto se divisa apenas un galpón. El abandono se nota con solo pararse en la intersección de Montiel y Vértiz: para la derecha está el centro abandonado, para la izquierda, los terrenos ocupados.
En setiembre la comuna presentó un proyecto para urbanizar las hectáreas y según explicó el subsecretario de Planeamiento local, Adrián Bassi, es a 15 años. Fue entregado a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) y en palabras simples, todavía esperan que la Nación entregue las tierras. Lo que está en juego es el crecimiento de la ciudad hacia el suroeste, con los márgenes del río y de Oro Verde.
Proyectaron ahora una nueva costanera, un área natural protegida en los anegadizos y un gran parque con el arroyo Tuyucuá. "Se avanzó en el pedido a la Nación para predisponer en el futuro de ese sector", confirmó Bassi, y sobre la parte de los terrenos frente a Kolbe y Rivero, dijo que solo recibieron de la gestión municipal anterior la obra del Cepla que construía una empresa tucumana, a la que al parecer nunca le habían pagado los certificados. "Con el cambio de gobierno se continuó la construcción, pero a muy bajo ritmo. Vinieron tres inspecciones del Sedronar –por la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina–. En Paraná se avanzó hasta el 40% y de la Nación quedaron por entregar 4 millones de pesos".
Bassi dijo que la obra igual avanzó y bien a pesar de hacerse en una zona complicada. "Recibimos la promesa de que esos fondos van a llegar. Tratamos de que ellos (por el Sedronar) nos ayuden a gestionar los terrenos, por lo menos la franja donde está la construcción vacante", sostuvo Bassi, pero agregó: "El problema es que la gestión anterior licitó si tener en claro la tenencia de esa tierra. Trabajaron para avanzar en un barrio con viviendas y al final no se hizo nada. De eso no recibimos ninguna documentación ni elementos. Solo el Cepla".
Para Bassi, al no tenerse en claro la tenencia de esas tierras, las construcciones oficiales que se hicieron fueron con un permiso municipal y se licitaron sin documental para contar con los terrenos en firme.
"Ahora, junto con esta presentación se trata de regularizar la situación, no solo de la tierra del Cepla, sino también la de los otros emplazamientos, en los mismos terrenos que no tienen base documental. Como el Procrear, que avanzó muchísimo y se sigue haciendo en el predio del Ejército. Nunca se hizo una gestión de regularización. Con esa presentación –la de 2016– no solo pensamos en el crecimiento de la ciudad sino de regularizar estos pedazos de tierra que se les dieron a unos y a otros para usos específicos, como el mismo Hospital".
En la franja lindera a Vértiz, el proyecto actual incluye viviendas y equipamiento para el barrio. Además planean descentralizar el centro cívico de Paraná en todo un sector en cercanías del Hospital.
"La Nación tiene la posibilidad de darnos una primera parte de la tierra, 100 hectáreas que involucran no solo al frente costero con un parque lineal y anegadizos, sino viviendas, emprendimientos privados y el eje cívico. Una línea con el Tuyucuá. Es muy importante la decisión. Es para darle potestad a la Municipalidad de que empiece a trabajar en forma efectiva", remató Bassi.
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Una institución educativa para grandes barriadas
La escuela Gaucho Rivero se encuentra en Padre Kolbe. Al otro lado de Montiel está el barrio que lleva el nombre de la institución educativa. Un grupo de padres, desde hace años, da pelea para que se construya en cercanías una Secundaria, ya que la misma funciona hoy junto a la Primaria en el mismo edificio.
El proyecto está desde siempre, pero nunca se concretó. Se trata de zonas muy carenciadas, con calles poco asfaltadas, problemas de iluminación, cloacas desbordadas, inseguridad y sobre todo carencia de políticas de contención de los niños y jóvenes. De eso uno se da cuenta de inmediato, con solo recorrer la zona y también lo cuentan los vecinos.
El proyecto elaborado por el grupo de padres avanzó. En 2014, en una porción de tierras hubo promesas de construcción de la escuela y el hecho llenó de esperanza a la zona. Las expectativas crecieron incluso cuando comenzó a levantarse el edificio, hoy inconcluso, del Centro Preventivo Local de Adicciones (Cepla) porque formaba parte del crecimiento de la zona y porque había sido anunciado juntos con la construcción de 1.000 viviendas y toda una urbanización.
Hoy, esos terrenos están ocupados por familias, algunas humildes, que levantaron sus casas precarias en el lugar.
Pero el grupo de padres sigue insistiendo. Aseguran que le pidieron a dependencias municipales y provinciales audiencias para poder mostrar la propuesta, una con estudios serios de la zona, de las necesidades educativas y de contención. Sin embargo, vieron caer la posibilidad cuando la iniciativa oficial pareció quedar otra vez en el olvido.