Al intervenir este viernes en un evento para conmemorar los diez años del primer encuentro de los Movimientos Populares en el Vaticano, el Papa Francisco no sólo volvió a pedirles que sigan luchando en paz, por “tierra, techo y trabajo” -algo que definió como “derechos sagrados”-, sino que también reivindicó la justicia social y se refirió en términos muy críticos a la situación social conflictiva de la Argentina. “En vez de pagar justicia social, el Gobierno pagó el gas pimienta”, aseguró el Papa Francisco al cuestionar a la Policía por los incidentes registrados la semana pasada, en una manifestación a favor de la ley de movilidad jubilatoria
El Papa Francisco criticó al Gobierno: "En vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta"
El Papa Francisco habló en una actividad para conmemorar los diez años del primer encuentro de los Movimientos Populares en el Vaticano
En su exposición, en la acompañó a representantes de movimientos sociales de la Argentina, entre ellos Juan Grabois y el titular de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Alejandro “Peluca” Gramajo, el Pontífice analizó: ”El silencio frente a la injusticia abre paso a la división social y la división social abre paso a la violencia verbal, y la violencia verbal a la violencia física, y la violencia física a la guerra de todos contra todos”.
"El diablo entra por los bolsillos", dijo el Papa
“Me hicieron ver un filmado de una represión de hace una semana, menos quizás. Obreros, gente que pedía por sus derechos en la calle y la Policía la rechazaba con una cosa que es lo más caro que hay, ese gas pimienta de primera calidad. No tenían derecho a reclamar lo suyo porque eran revoltosos, comunistas... y el gobierno se puso firme: en vez de pagar justicia social, pagó el gas pimienta. Les convenía. Ténganlo en cuenta”, aseguró Francisco.
Incluso, mencionó un presunto hecho de corrupción que se habría producido recientemente bajo la gestión libertaria. “Mi abuela nos repetía siempre, estén atentos que el diablo entra por los bolsillos. Siempre. Que una coima aquí, una cosa allá...”, arrancó el Papa.
“Me contaba un emprendedor internacional, que estaba haciendo en Argentina unas inversiones de extensión que estaban llevando adelante, que trabajan muy bien y fue un acuerdo. Fue a presentar al ministro un nuevo plan, el ministro lo atendió muy bien y dijo ‘dejemeló, ya lo van a llamar...’”, continuó.
“Al día siguiente, el secretario del ministro lo llamó, le dijo si puede pasar, ‘así lo entregamos el permiso’. Le entregó los papeles y la firma...y cuando él se estaba por levantar, le dijo: ¿y para nosotros, cuánto? La coima. El diablo entra por el bolsillo, no se olviden”
Además de Grabois y Gramajo, en la cumbre intervienen diversos referentes de los movimientos populares y de la Iglesia, como el prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, Cardenal Michael Czerny, el Cardenal Peter Turkson y dirigentes del núcleo fundador del vínculo entre los movimientos populares y la Iglesia como Juan Grabois (Argentina), Xaro Castelló (España) y Joao Pedro Stedile (Brasil).
De distintos continentes
En representación de los movimientos populares de los distintos continentes fueron invitados Anuka Thirimadura, (La Via Campesina, Asia), Rose Molokoane (Slum Dwellers International, Africa), Susana Réfega (Movimiento Laudato si’, Europa), Naema Yaqoub (Mediterranea Saving Humans / Refugees in Libya, Africa), Nicole Leiva (Puente Alto Chile, Latinoamérica) y Gloria Morales (Pico Network, Norte América).