En el club Estudiantes de Paraná siguen apostando al crecimiento del rugby, pero en diferentes ámbitos. No solamente apuntan a aumentar la base en las Infantiles, sino también a convencer a padres y exjugadores a que se acerquen para cumplir cualquier tipo de función dentro de la entidad. A raíz de esta intención, hace algunos años surgió la idea de crear un encuentro que tenga como principal objetivo reunir a las personas que de alguna u otra forma tuvieron un paso por el CAE y que se alejaron por diferentes motivos. Claro que para hacer algo distinto, los organizadores dejaron de lado la ovalada y propusieron que la actividad se desarrolle con partidos de fútbol.Así surgió el Torneo de Camadas para Mayores de 35 años, que este sábado tendrá su séptima edición.
Por un día, cambian la ovalada por el fútbol
UNO / Juan Ignacio Pereira
Los encuentros serán en El Plumazo, con diferentes equipos que se armaron para disfrutar de una jornada a pleno con viejas glorias del Albinegro. Como sucedió el año pasado, el campeonato volverá a llamarse Julio Ledesma, en lo que es un homenaje en vida para uno de los referentes máximos que tiene Estudiantes. Los cotejos comenzarán a las 14.30 y estarán en juego las Copa de Oro, Plata y Bronce. Además, se entregará la Cuchara de Madera al peor equipo del certamen. Andrés Mora, uno de los organizadores y entrenador de la M7, habló con UNO y contó en líneas generales cómo surgió esta iniciativa.
"Somos exjugadores del club y tenemos la idea de volver a juntar a personas que por distintos motivos decidió dejar la actividad, algunos se fueron a trabajar afuera y perdieron contacto con la entidad. Con esto queremos que las diferentes camadas se junten de nuevo. Así convencimos a muchas personas para que vuelvan a tener el sentido de pertenencia que había cuando éramos chicos. El rugby está muy asociado a lo que es el trabajo en grupo. Por eso intentamos sacarle el miedo a no saber qué pueden hacer. Colaboradores se necesitan siempre. Eso no va a cambiar”, afirmó.
En este sentido, Mora señaló que el constante flujo de jugadores que hay en el club, exigen una atención mayor. “Los chicos te demandan mucho tiempo. Si bien está todo súper organizado en el rugby Infantil, hace falta gente para que ayude en diferentes ámbitos. No solamente como entrenadores o managers. Hasta los abuelos del club se han organizado para poner su granito de arena y a esto Julio (Ledesma) lo sabe muy bien”, señaló.
Sobre por qué decidieron cambiar de deporte para el encuentro, el exjugador del CAE expresó: “Elegimos jugar al fútbol porque nosotros ya tenemos una M35 de rugby, donde hay 40 o 50 personas, pero solo juegan unas 20 o 25. Algunos están lesionados y no quieren golpearse. Entonces con el fútbol se integran más por la parte física. Además es un deporte que es una pasión, como lo es el rugby para nosotros. En Atlético del Rosario participamos de un evento similar y nos gustó la idea. Había gente que no podía siquiera tacklear, pero en el arco se sentía feliz. Este encuentro también es una celebración para los que están en el club, se hace a fin de año para agasajar a todos los que están trabajando en diferentes aspectos”.
En cuanto a los detalles organizativos, Mora señaló: “Van a participar 17 camadas. La más vieja es la de 1967 y la que se integró este año es la del 84. Hay una camada que es la 68 que tiene muchos lesionados, con dos o tres aptos para jugar que se van a mezclar con otros equipos. Pero el torneo se juega todos contra todos, sin importar las edades y eso es muy divertido. Se va a jugar en tres canchas con equipos que estarán integrados por siete jugadores titulares sin límite de cambios. Serán dos tiempos de 10 minutos y con árbitros de fútbol que siempre colaboran con nosotros. A esto lo hacemos para darle más seriedad, porque sabemos que hay partidos que se ponen picantes. Por eso, para que no haya problemas hay jueces imparciales”.
Por último, Mora contó porque se decidió llamar al torneo Julio Ledesma. “Empezamos a buscar a alguien que nos haya marcado desde chicos y en el grupo de organizadores hicimos un remolino de nombres. Cada camada tiene un enlace, porque viene gente que vive en diferentes puntos del país. Cada uno dio su opinión, pero el nombre de Julio Ledesma fue unánime porque pasó por todas las camadas que juegan el torneo. Ya sea como entrenador o colaborador y es hasta el día de hoy que sigue moviéndose mucho por el club. Es la esencia de lo que queremos rescatar nosotros. Este año también hay una mención especial para otra persona, que es una sorpresa. Es alguien que nunca jugó al rugby, pero que lo dio todo por este deporte”, finalizó.
El homenajeado
Julio Ledesma también habló con UNO sobre lo que significa este encuentro y se excusó porque en esta edición pegará el faltazo.
“Me siento avergonzado porque en esta ocasión no voy a poder acompañarlos porque tengo un compromiso que tomé hace 50 años. En Bahía Blanca se juntan los exalumnos del colegio Don Bosco así que voy a tener que viajar. Para mi es muy importante esto, muchas veces rechacé algunos homenajes, pero esto es algo distinto porque lo hace gente a la cual conozco y quiero mucho. Hoy, ellos son el semillero del club en cuanto a dirigentes se refiere. Hace años que trabajamos en el semilleros de jugadores, pero esto debe trascender porque en el club hay lugar para todos. Varias veces pedí la palabra en algún que otro tercer tiempo y a esto se los dije siempre a los chicos”, sostuvo.
Ledesma también dejó en claro que hay muchos otros dirigentes que también se merecen un homenaje en vida. “Me pongo a ver a mis compañeros veteranos y me preguntó por qué yo. Hay verdaderos monstruos que han sido hasta Pumas. No sé si lo merezco, pero ellos me lo hacen saber siempre que sí”, cerró.