Por unos pocos pesos corrieron un riesgo que los llevó a prisión: una pareja humilde del barrio Hijos de María de Paraná guardaba en su casa la droga que les daban, según dijeron, integrantes de la barra del club Patronato, entre ellos un referente del barrio Municipal, apodado Freddy. Al principio intentaron desligarse al sostener que lo hacían bajo amenazas, pero luego reconocieron su participación en el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
Condenados por guardar la droga de la barra de Patronato
Jorge Guillermo Berón, alias Guiso, de 52 años, aceptó cuatro años y seis meses de prisión, en tanto que su pareja Fabiana Raquel Martínez, de 43, cumplirá cuatro años. Ambos lo harán en su casa, donde los encontraron con la droga, de calle Quirós al final, ya que el hombre padece una discapacidad y porque ambos tienen seis hijos a cargo.
Al procedimiento lo realizó la Policía, el 19 de diciembre de 2012, con orden del entonces juez de Instrucción de Paraná Elvio Garzón, con el objetivo de hallar armas de fuego y municiones por los enfrentamientos armados que había por aquellos días en la zona este de la ciudad. Al requisar la vivienda, los uniformados hallaron en un mueble del dormitorio de los hijos 40 ladrillos que contenían poco más de 31 kilos de marihuana (equivalente a 117.509 dosis)y un envoltorio con 200 gramos de cocaína.
En la indagatoria, Berón dijo que la droga no les pertenecía a ellos, sino que la tenían allí para su resguardo, a cambio de 100 pesos que les daba un tal Freddy, integrante de la barra de Patronato. De todos modos, con este argumento no lograban desligarse del delito de narcotráfico, por lo que la pareja optó por negociar con la Fiscalía una pena menor y declararse culpables, en un juicio abreviado.
En la sentencia, los jueces Noemí Berros y Roberto López Arango sostuvieron que “resulta irrefutable que ambos imputados habían facilitado su morada, con el propósito de favorecer una intensa actividad de comercialización de estupefaciente. En este acontecer la importante cantidad de material incautado, es un indicador que abona un destino incuestionable y profuso de comercialización”.
No es la primera vez que existe una condena por almacenamiento de estupefacientes, ya que hubo varios casos en que personas fueron sorprendidas con un gran cargamento de droga en su poder, pese a vivir en condiciones que distan de ser las de importantes narcotraficantes.
En la instancia de apelación del procesamiento de Berón y Martínez, en 2013, la defensa oficial había planteado que la circunstancia de presiones en el barrio para que guarden la droga, que no era de ellos, colocaba a la pareja en una situación de víctimas como “daño colateral del narcotráfico”.
Incautaron droga en la autovía 14
Ayer por la mañana, en un control sobre la autovía nacional 14 en Gualeguaychú, la Gendarmería Nacional secuestró 20 kilos de marihuana que eran trasladadas en el baúl de un colectivo.
El procedimiento se realizó ayer a las 7, en la intersección de la autovía con la ruta provincial Nº 20, cuando los uniformados detuvieron la marcha de un colectivo de larga distancia de la empresa Águila Dorada que había salido desde Chaco y tenía como destino Capital Federal, informó El Día.
La sospecha comenzó cuando el perro labrador Ody, entrenado para detectar narcóticos, ladró y marcó la baulera donde estaban los dos bolsos con los ladrillos de marihuana.
La droga fue secuestrada, pero no se pudo incriminar a ningún pasajero en el transporte de la sustancia, por lo que no hubo detenidos.