Ambas aprovecharon la jornada para trabajar en combinaciones de manos y piernas en distintas alturas, es decir pegar piñas y patadas buscando la mejor coordinación posible. La práctica la lleva a mejorar la técnica y sobre todo a estar preparadas para responder un ataque en la calle.
verano adentro
Emponderadas.
Foto UNO / Mateo Oviedo.
Cristian
Pocho Tablada, a los 33 años ya tiene una experiencia considerable para resaltar que el
kick boxing le hace bien para "despejar la mente del trabajo y las exigencias de la vida diaria". Hace ocho años que entrena y este miércoles hizo guantes con Emiliano Chiavaro, un pibe de 22 años que tiene la ilusión de concretar su primera pelea oficial.
Al fondo del gimnasio, con el graffiti como escenografía, Maxi El peluquero Ruiz Díaz le pegaba con toda su fuerza a las cubiertas de un auto de carrera que colgaba del techo. El Peluquero tiene 40 años y trata de cumplir con las tres sesiones semanales de entrenamiento porque se despeja de los problemas cotidianos.
Todos decidieron, aunque sea por unas horas, ganarle al sedentarismo y mantenerse en movimiento. Un acto de rebeldía en estos tiempos en que las obligaciones demandan cada vez más horas de dedicación y generan tantos trastornos.
adentro
Los alumnos del profe Sebastián Leguiza.
Foto UNO / Mateo Oviedo.