Después del partidazo que jugaron por la Supercopa de España, Atlético de Madrid y Real Madrid volvieron a enfrentarse en los octavos de final de la Copa del Rey y el clásico otra vez entregó un gran espectáculo. Otra vez fueron a alargue después del 2 a 2 y, ahora, festejó el equipo de Diego Simeone.
Atlético de Madrid se impuso en un clásico vibrante
Prensa Atlético de Madrid
El francés Antoine Griezmann fue la figura de Atlético de Madrid, marcando un gol y dando una asistencia en el tiempo extra para el triunfo Colchonero.
En el Cívitas Metropolitano, con Rodrigo de Paul de titular y Nahuel Molina en el complemento (Ángel Correa se quedó en el banco de suplentes), al Atlético otra vez se le escapó el triunfo en el tiempo reglamentario después de estar dos veces arriba. Sin embargo, a diferencia de la Supercopa, pudo festejar luego de imponerse por 4 a 2.
En un primer tiempo caliente y parejo, que terminó 1 a 1, los goles llegaron sobre el final. En primer lugar, a los 39 minutos, el carrilero izquierdo brasileño Samuel Lino abrió la cuenta para el Colchonero. Sin embargo, la alegría le duró poco a los de Simeone: a los 46', un centro de Luka Modric complicó a Jan Oblak y la pelota se le terminó metiendo de manera insólita.
En el segundo tiempo, Atlético volvió a ponerse en ventaja con un tanto de Alvaro Morata a los 12 minutos y tuvo chances clara para convertir el tercero. No lo pudo cerrar y Real Madrid llegó otra vez al empate.
A ocho del final, Joselu apareció por el segundo palo para mandar la pelota a la red con un cabezazo y el gol fue convalidado después de la revisión en el VAR por la posición del jugador del Merengue.
El alargue volvió a ser decisivo y la gran figura del tiempo extra fue Antoine Griezmann, quien primero puso 3-2 con un tremendo golazo y, después, asistió a Riquelme para sentenciar el encuentro y darle la clasificación a los cuartos de final de la Copa del Rey al Atlético de Madrid.