El vino es una de las bebidas más populares en la Argentina, tanto que se lo identifica como la “bebida nacional”, tal como fue declarado oficialmente por la Ley Nº 26.870 en el año 2013, buscando difundir la cultura e historia detrás de su producción y de su consumo. Consolidado a partir de hábitos sociales propios de la cultura y la identidad argentinas, acompaña en diferentes ámbitos tanto en momentos cotidianos como en algunos importantes que ameritan un brindis.
El consumo de vino no repunta: comerciantes de Paraná afirman que cayó un 20% durante el año
En los negocios del rubro coinciden en que la pérdida de poder adquisitivo de los clientes es lo que impacta en la demanda general.
Por Vanesa Erbes
El consumo de vino se retrajo ante la baja del poder adquisitivo de los consumidores.
Sin embargo, su consumo sigue cayendo. Según los últimos datos disponibles del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en julio de 2025 las ventas internas se desplomaron un 13% interanual, con un consumo per cápita que apenas llegó a 1,39 litros, lo que representa una caída del 14% respecto al año pasado.
En cuanto al consumo anual, mientras en los años 70 los 80 litros por persona, hoy la industria lucha por sostener un promedio anual que no supera los 18 litros, en un contexto en el que también las exportaciones bajaron.
La demanda de vino en Paraná
Los comercios del sector en Paraná no escapan a esta tendencia y afirman que la caída en la demanda a lo largo de este año ronda el 20%.
Susana, referente de una vinoteca de la zona céntrica, afirmó a UNO: “Se nota bastante la caída en la demanda de vino. Se está acentuando cada vez más desde hace varios meses, pero este mes ha sido catastrófico”.
En este marco, descartó que esto se deba a una cuestión estacional: “Tiene que ver más con una caída del poder adquisitivo, sin dudas, como ocurre también en otros rubros comerciales”, observó, y aclaró: “Los precios en general no han subido. Está todo medianamente igual y en las marcas que tenemos nosotros estamos desde el año pasado con el mismo precio”.
Gonzalo Masramón, propietario de una vinoteca de calle Alsina con siete años de trayectoria, en Paraná, coincidió: “A lo largo de los años ha ido decreciendo el consumo y la cantidad de unidades vendidas. La demanda cayó en este último tiempo un 20% aproximadamente”.
Al respecto, analizó: “Creo que es por el poder adquisitivo de la gente y no por una cuestión estacional”.
“En general llevan alguna botella para el fin de semana, lo de llevar para todos los días se ha ido perdiendo un poco, están más espaciadas esas compras. Y se ve también la gente que cambia de marca por algo más económico, tanto en vinos como en los cigarrillos bajan muchísimo la calidad”, aseguró.
Tendencias
En cuanto a las preferencias, sostuvo que el tipo de vino que más se vende es el Malbec: “Es un 95% de lo que se vende”.
Ante la consulta sobre si el gusto por otras bebidas que hoy están de moda en el mercado desplazaron el consumo del vino, como es el caso del gin, analizó: “Creo que no. El gin se consume mucho en verano, y creo que no influye en la baja del consumo de vino. Al gin lo toman más que nada la gente joven. Por lo general el público de más edad es el que opta por el vino. Los hombres por algún varietal tinto y las mujeres siempre por el vino blanco dulce”.
Y comentó a UNO: “Siempre van apareciendo otras variedades. El problema que se está dando es que se complica incorporar etiquetas nuevas, justamente porque no hay tanta venta. Ya ahora es más que tenés que reponer y es distinto”.
Precios
En cuanto a las variaciones en los valores, precisó que “han ido aumentando de a poquito, cada dos meses alrededor de un 5%”, y comparó: “Nada que ver con el año pasado, que las subas se notaban: ahora directamente ni le prestamos atención a los aumentos, y a los controles que antes hacíamos cada dos días ahora los hacemos cada dos meses. Si hay un incremento es mínimo ahora y no te influye, o sea, no es que te genera pérdidas como en otro momento”.
Acto seguido, precisó: “Un vino tinto cuesta desde 1.800 pesos en adelante; a ese precio ya por ahí no es Malbec, es una mezcla. Un Malbec arranca a partir de los 3.000 pesos, y hay otros de más valor: yo tengo un Luiggi Bosca a 14.900 pesos, y si bien hay más caros sólo los traigo por encargo, porque no rotan. En tanto, un vino blanco dulce está desde 3.900 en adelante”.