Frente a la Casa de Gobierno, Paraná se volvió más humana
La plaza Mansilla, con todas sus polémicas en los hombros, es el primer espacio de la capital provincial en donde se toma una medida a favor de las personas.
7 de septiembre 2016 · 13:35hs
El 4 de julio cuando anunciaron los premiados del concurso "Identidad y Libertad" que organizaron en la vicegobernación de Entre Ríos, afuera de la Casa de Gobierno llovía. El agua quedaba como una placa que plastificaba el asfalto reluciente de la plaza Mansilla, que todavía estaba en obra.
Por esos días la polémica en torno al espacio público, frente a la Casa Gris, seguía abierta porque, en primer lugar, el área de Planeamiento del gobierno de Entre Ríos había desestimado el proyecto original de los arquitectos Rubén Cabrera y Margarita Trlin, que ganó el concurso público en 2012.
Como siempre sucede cuando los autos liberan las calles, con el correr de los días, padres y madres comenzaron a ocupar, junto a sus hijos, las callecitas de la plaza para practicar deportes y deslizarse con sus patines y patinetas.
Ayer inauguraron la muestra de fotografías con la presencia del gobernador Gustavo Bordet y el vicegobernador Adan Bahl. Los dos coincidieron con lo importante que es recuperar un espacio público para la ciudad y la provincia.
Entonces el hecho político se magnificó: desde el gobierno de Entre Ríos mostraron que se puede cambiar un estacionamiento irregular, que parecía un cementerio de autos, en un paseo público para que disfrute la gente de a pie. A esto hay que sumarle el cuidado del ambiente y por consecuencia, el embellecimiento del edificio que fue construido en 1885 y declarado monumento histórico nacional en 1942.
Frente a los tres poderes democráticos y al edificio del Consejo General de Educación, que también alberga diferentes áreas públicas provinciales, la plaza Mansilla se convirtió en un ícono para los que imaginan una ciudad más humana.