Días atrás, vio la luz Savia, el nuevo disco del músico y compositor concordiense, Alfonso Bekes. El álbum, que ya está disponible en Tidal, Spotify y Youtube, consta de nueve obras instrumentales para guitarra acústica que compuso casi exclusivamente en marzo de este 2021.
Alfonso Bekes interpela con un sonido despojado y acústico
Por Luciana Actis
Se trata de canciones cien por ciento instrumentales, pero de alto perfil poético: Con el sol de la mañana, Entre la noche y el tiempo, Los parches y la orilla, Preludio de las aves y las horas, Casa, Mareas, Después de la lluvia e Incondicional. En todas ellas, Bekes da alas a su talento interpretativo, pero esta vez con el toque especial que dan las cuerdas de acero. Son canciones rítmicas pero de armonías luminosas, sonidos íntimos que transmiten alegría, optimismo, paz, paisajes de ensueño, nostalgia.
Al escucharlas, se pueden identificar influencias de Johann Sebastian Bach, Luis Alberto Spinetta, y hasta Carlos Aguirre, pero en un blend al que Bekes ha sabido imprimirle su sello propio. De hecho, viene haciendo camino en la música desde hace más de 24 años. Además de recorrer escenarios en Argentina y otros países como solista, integró bandas de rock, grupos de folclore, de tango, de música latinoamericana, ensambles de cámara, ensambles experimentales, dando cuenta de su amplia versatilidad musical.
Incansable compositor, su trabajo está registrado en varios discos de los que se destacan: Violeta y Orillania (Carlos Aguirre Grupo), Raiz Spinetta y Flores de la noche (Silvia Salomone & Alfonso Bekes), La Rifa del Viento y Otros Paraísos (La Rifa Del Viento), Desiertos, Mares y Cielos (Electra Barbagelata & Alfonso Bekes) y su disco solista La Puerta Invisible 2021.
Escenario dialogó con él sobre Savia, su más reciente material
—¿Qué nos podés contar sobre Savia?
—Casi desde que empecé a tocar la guitarra en el año 96 estuve componiendo cosas instrumentales, improvisando. Cuando aprendí a escribir música me desvelaba intentando bajarlas al papel, las grababa. De todo eso no queda nada hoy, quizás mejor así. Después empecé a estudiar música formalmente, di muchos conciertos de guitarra, hice concursos y demás. Pero nunca volví a componer cosas instrumentales para guitarra durante muchos años. Hace algún tiempo la llama se encendió con fuerza nuevamente. La guitarra acústica de cuerdas de acero me estimula mucho como guitarrista y como compositor. Y en marzo de este año compuse y escribí casi todas las músicas que componen Savia.
—¿Por qué decidiste esta vez volcarte hacia lo acústico y la guitarra sola?
—Grabé un disco de guitarra clásica solista en 2011. Pero nunca lo publiqué. Me di cuenta que primero tenía que contener mis propias composiciones. Así lo sentía y en aquel álbum grabé Bach y Villa-Lobos, pasaron años. En la guitarra acústica de cuerdas de acero encuentro un instrumento con el que siento más afinidad en este momento. Y siento que es algo fresco también en el panorama de la música argentina para guitarra, donde el 99 por ciento son obras para guitarra clásica o criolla.
—¿Cómo fue el proceso de componer estas canciones?
—El proceso fue misteriosamente fluido. La sensación era de estar transcribiendo algo que ya estaba hecho. Fue un mes intenso y luego en unos cuatro días lo grabé, en mi casa. Si bien es un disco solista e instrumental, participaron Lucía Espeche (violoncello en Mareas) y Luis Medina (guitarra piccolo en Preludio de las aves y las horas), dos colegas y amigos que admiro mucho. La portada es un diseño de Carlos Pagés, un amigo que además siempre fue un un entusiasta de la realización de este álbum. Desde los primeros días de mayo está disponible en las plataformas de streaming y en mi canal de Youtube. Cada día llegan mensajes muy emocionantes y estimulantes de gente que lo escucha.
Podría agregar que todas estas obras llevan una dedicatoria. A personas clave en mi vida. Cada música es una suerte de carta, un mensaje o una ofrenda sonora. En mis redes sociales estoy publicando las partituras y tablaturas y contando a quiénes están dedicadas y cómo surgieron. También estoy preparando un libro que compagina todo ese material.
—¿Tenés pensada alguna presentación virtual o presencial para presentarlo oficialmente?
—¡Es lo que más quiero! Ha habido algunas propuestas e ideas, pero en este contexto es difícil planear una fecha y lugar exactos. Sí tengo pendiente lanzar en los próximos meses, versiones en video de cada una de los temas.
Ficha técnica:
Alfonso Bekes: Guitarra Acústica, producción general, edición, mezcla y mastering.
Luis Medina: Guitarra Piccolo en Preludio de las aves y las horas.
Lucía Espeche: Violoncello en Mareas.
Diseño de tapa: Carlos Pagés -basado un grabado botánico del siglo XIX.
Grabado en marzo y abril de 2021.
Todos los temas compuestos por Alfonso Bekes excepto “Mareas” (Bekes-Espeche).