El mediodía de este viernes un grupo de mapuches ingresó a la parroquia Nuestra Señora de Luján, en El Bolsón y realizaron una ocupación del edificio en reclamo por el desalojo de los territorios del Obispado de San Isidro en Villa Mascardi.
Mapuches ocuparon una iglesia en El Bolsón
Los medios locales informaron que unas 10 personas ingresaron a la parroquia y permanecieron junto al sacerdote Ricardo Citadini que salió pasadas las 13.30.
El Intendente de El Bolsón, Bruno Pogliano, aseguró estar "muy preocupado" por lo que está ocurriendo. "Estas personas retuvieron a un franciscano en la iglesia. Es una forma muy violenta de reclamo", denunció en diálogo con medio nacionales.
El funcionario declaró sobre el conflicto "sobrepasó cualquier límite previsible". Y agregó: “Esta gente tiene que deponer esta actitud violenta”. Cerca de las 14 los ocupantes se retiraron de la Parroquia.
COMUNICADO DEL OBISPADO DE SAN CARLOS DE BARILOCHE
En el día de la fecha, 6 de noviembre de 2020, un grupo de personas, que se identificaron como pertenecientes al Pueblo Mapuche, han irrumpido en la Parroquia Nuestra Señora de Luján del Bolsón. Lamentamos sinceramente éstos hechos y nos solidarizamos con nuestros hermanos Franciscanos y con la comunidad de fieles católicos.
“Ningún tipo de violencia, ni en los reclamos ni en las respuestas a los mismos, no es nunca, ni lo será, una solución, sino un agravamiento de los conflictos existentes. La primera víctima de la violencia es la paz y la concordia entre las personas” (comunicado del Obispado de Bariloche del 26 de noviembre de 2017).
“Entendiendo el respeto que algunos miembros del Pueblo Mapuche piden para sí, no obstante, la Iglesia también reclama respeto y consideración por un lugar sagrado para los católicos, como es un Templo, teniendo en cuenta que el Obispo permanentemente ha escuchado y dialogado con cuantos han acudido a él”. (com. del Obispado de Bariloche del 25 de abril de 2018). Nos provoca mucho dolor los daños realizados al interior del Templo.
El Estado Nacional, debe asumir –impostergablemente- la responsabilidad que le corresponde, de solucionar los conflictos que surgen de los reclamos de los Pueblos Originarios, que aparecen en muchos lugares del territorio nacional, no solo en la Patagonia, reconociendo, en los casos que así correspondiere, los derechos legítimos, diferenciándolos de los que pudieran no serlo y poniendo en movimiento inmediatamente, los mecanismos legales para que esos derechos legítimos puedan efectivamente ejercerse.
Es la añeja renuencia del Estado Nacional a cumplir con ésta responsabilidad, la permanente promotora de los conflictos que todos los días crecen y se intensifican.
Ello implica, necesariamente, la implementación de la Ley 26.160.
“Creemos en el dialogo, como constructor de puentes, que acerca posiciones, permite el mutuo conocimiento y la compresión de las diversas posturas.”