Tomás Cáceres cumplió el sábado uno de los objetivos que se planteó cuando arribó a Paraná. A los 22 años el mediocampista diestro tuvo su bautismo en Primera División en el empate entre Patronato y Vélez Sarsfield en el marco del capítulo inicial de la Liga Profesional de Fútbol.
Tomás Cáceres cumplió uno de sus sueños
UNO / Juan Ignacio Pereira
En su tercer encuentro en el banco Tomás Cáceres tuvo su bautismo en Primera División.
El volante había firmado planillas en dos oportunidades. Fue en el interinato que encabezó Gabriel Graciani a fines de 2020 en el marco de la Copa Diego Armando Maradona. En ambos juegos el concordiense observó el juego desde el banco de suplentes, pero no ingresó al campo de juego.
Cáceres debió esperar 18 meses para sumar sus primeros minutos en la elite. El entrenador Facundo Sava lo incluyó en la lista de concentrados para asumir la primera misión del Rojinegro en la Liga Profesional de Fútbol 2022. En su tercera convocatoria el sueño de Tomás se efectivizó.
A los 85 minutos el DT llamó al futbolista que en 2014 se sumó a las categorías formativas de Patronato. Segundos después reemplazó a Sebastián Medina, en la última variante del elenco de barrio Villa Sarmiento.
Cáceres pudo transformarse en el héroe de la jornada. Sacó un bombazo que Lucas Hoyos, el arquero del Fortín, despejó al tiro de esquina. El pibe quedó con el grito de gol atragantado. Se retiró con el reconocimiento del Pueblo Rojinegro, que despidió con aplausos al mediocampista entrerriano.