La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia de salud pública internacional ante la propagación de la viruela símica más conocida como la viruela del mono cuyos contagios en Argentina ya ascienden a 24. Para clarificar el alcance de la enfermedad y conocer síntomas y medidas de prevención el organismo internacional difundió las principales dudas.
Viruela del mono: diez cosas que hay que saber
Viruela del mono: diez cosas que hay que saber
1- ¿Qué características tiene la viruela del mono?
La viruela del mono es provocada por un virus perteneciente al género orthopoxvirus, al igual que la viruela humana. Se trata de una enfermedad zoonótica, es decir que puede transmitirse de animales a personas y luego entre personas. Los primeros casos en humanos comenzaron a observarse en 1970 en la República Democrática del Congo. Siempre se mantuvo como una enfermedad endémica y en pocas ocasiones se han reportado casos fuera del continente. El 15 de mayo de 2022 se informaron cuatro casos de viruela del mono en el Reino Unido y, con el correr de los días, se confirmó su aparición en más de 70 países.
2- ¿Qué implica que la OMS haya declarado la emergencia internacional?
La OMS considera que el riesgo global en casi todas las regiones es intermedio, con excepción de Europa, que es calificada como de alto riesgo. El organismo recomendó a las personas con mayor exposición reducir el número de parejas sexuales, ya que se observa que es la principal vía de contagio, aunque no la única. La declaración quita las barreras burocráticas a la hora de aprobar nuevos tratamientos y vacunas que permitan el cese de la propagación del virus.
3- ¿Cuántos casos de viruela del mono hay en el mundo y en la Argentina?
La OMS informó que hasta la fecha hay contabilizados más de 23.000 casos en todo el mundo. Actualmente Europa es la región con mayor circulación. Los diez países más afectados son España, Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, Países Bajos, Canadá, Brasil, Portugal e Italia, que representan el 89,1% de los casos notificados a nivel mundial. En Argentina, hasta 27 de julio se reportaron un total de 24 casos de viruela símica, de los cuales 13 se notificaron en la ciudad Autónoma de Buenos Aires, 6 en la provincia de Buenos Aires, 3 en Córdoba y 1 en Mendoza. Todos los casos son de sexo masculino con un promedio de edad de 36 años.
4- ¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad?
Los síntomas de la viruela del mono suelen desarrollarse entre los 6 y los 13 días posteriores al contacto con un caso confirmado, aunque este período puede extenderse hasta 21 días. Los más frecuentes son fiebre, dolor de cabeza, muscular o de espalda, cansancio o inflamación de los ganglios. Este último es el síntoma más característico, que la diferencia de otras enfermedades que inicialmente pueden parecer similares como la viruela tradicional, el sarampión o la varicela.
Estas manifestaciones son sucedidas por una erupción en la piel, que se presenta en la cara para luego expandirse por distintas partes del cuerpo, principalmente en las palmas de las manos y las plantas de los pies. Posteriormente se forman costras que se caen al poco tiempo. Estas lesiones en la piel pueden ser planas o ligeramente elevadas, están llenas de un líquido claro y suelen producir picazón, molestia o dolor. También se pueden ver afectadas las mucosas orales, los genitales y las conjuntivas, así como la córnea de los ojos.
5- ¿Cómo se contagia?
Se ha observado que es altamente contagiosa. Actualmente se está estudiando si se puede transmitir de forma presintomática o asintomática. De ser así, dificultaría la contención del brote". La viruela símica puede transmitirse a las personas cuando entran en contacto con un animal infectado, que pueden ser roedores y primates. Entre humanos, se contagia a través del contacto físico, que puede incluir cara a cara, piel con piel, boca con boca, boca con piel y contacto sexual.
Los especialistas también advierten que otras formas de transmisión se encuentran en las gotas respiratorias que emitimos en contacto cercano con otro. La erupción de la piel suele ocurrir en los lugares por los que el virus ingresó y son especialmente infecciosos, como también lo son las lesiones en la boca.
6- ¿Cuáles son las medidas de prevención?
La principal recomendación del Ministerio de Salud de la Nación para prevenir el contagio es evitar el contacto cercano con personas que hayan confirmado tener la infección o presenten síntomas compatibles con la enfermedad. En esos casos, es importante además no compartir artículos como utensilios, sábanas o toallas. Si habitan un mismo espacio, se aconseja utilizar barbijo y mantener el distanciamiento. El riesgo de contraer el virus a través de los animales puede reducirse evitando el contacto sin protección de la carne y/o sangre de animales salvajes.
7- ¿Qué gravedad reviste la enfermedad?
Los pacientes suelen desarrollar sus propias defensas para superar la infección, por lo que se la cataloga como una enfermedad autolimitada. Según la Organización Mundial de la Salud, a lo largo de los distintos brotes se han observado tasas de letalidad de entre 0% y 11%, aunque recientemente ha sido de entre 3% y 6%.
Los expertos advierten que, aunque la viruela símica se puede curar, hay que estar atentos a las complicaciones causadas por infecciones secundarias, que ocurren cuando las bacterias ingresan al organismo a través de las lesiones cutáneas. Entre ellas se destacan la bronconeumonía, la encefalitis, el síndrome séptico y la infección de la córnea, que puede generar la pérdida de la visión.
8- ¿Afecta a algún grupo poblacional en especial?
Las personas propensas a desarrollar un cuadro más grave son aquellas que presentan inmunodeficiencia, las mujeres embarazadas y los niños pequeños, que tienen un sistema inmunológico más inmaduro. La OMS advierte además que los ciudadanos menores de 50 años pueden ser más susceptibles a contraer la enfermedad debido a la finalización de las campañas de vacunación contra la viruela humana, que también protege contra este virus.
9- ¿Hay vacunas?
Estudios de observación demostraron que la vacunación contra la viruela humana tiene una eficacia de alrededor del 85% en la prevención de la viruela del mono. Por lo tanto, quienes se encuentren vacunados pueden desarrollar una enfermedad más leve. Sin embargo, luego de la erradicación de la enfermedad en 1979 finalizaron las campañas de inmunización y la vacuna utilizada en aquel momento no se encuentra disponible.
Actualmente hay dos vacunas aprobadas en Estados Unidos, que no se encuentran en la Argentina: la primera es Jynneos (también conocida como Imvanex), indicada para la prevención de la viruela humana en adultos de 18 años y en mayores con alto riesgo de contraer estas infecciones. Con una tecnología de virus atenuado, es también efectiva contra la viruela del mono y podría ser aplicada a poblaciones con inmunocompromiso. Las investigaciones publicadas muestran que es capaz de evitar el desarrollo de la enfermedad si es administrada en los cuatro primeros días tras la exposición al virus, mientras logra que los síntomas sean leves si se suministra entre luego del cuarto día. La segunda vacuna autorizada es ACAM2000, que fue producida ante un eventual ataque biológico y no puede utilizarse en personas inmunodeprimidas.
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) autorizó la extensión de esta vacuna para su uso en la prevención de la viruela del mono. Países Bajos ya comenzó a aplicarla y otros países como Reino Unido y España actualmente están evaluando ofrecer la a los trabajadores de la salud como una medida preventiva previa a la exposición al virus.
Sin embargo, desde la OMS advierten que por el momento no se recomienda una vacunación masiva y que es necesario que también se tomen medidas de prevención.
10- Tratamiento y recomendaciones
No existen aún tratamientos comprobados. La Agencia Europea de Medicamentos autorizó el uso de un antivírico originalmente desarrollado para la viruela, pero todavía no está ampliamente disponible sino que se prescribe solo en un contexto de investigación clínica. Los tratamientos que existen son aquellos utilizados para aliviar los síntomas. Se recomienda no rascarse las lesiones, lavarse las manos antes y después de tocarse las ampollas, mantener la erupción seca, descubierta y limpia con agua esterilizada, enjuagar las lesiones bucales con agua salada y tomar paracetamol si persiste el dolor. Los organismos de salud indican que los pacientes deben aislarse en sus casas y notificar al médico de forma inmediata.