A un hombre, su hijo y un conocido, les ofrecieron un negocio en el que recibirían un monto de dinero que, por las condiciones en que se encontraban, resultaba tentador. Debían llevar un bolos con droga desde Corrientes hasta Santa Fe. Pero en el trayecto los descubrieron, en un control de Gendarmería en la ruta 12, en La Paz. En un juicio abreviado, acordaron cumplir cinco años de prisión.
"Los empresarios de la droga contratan a vulnerables y permanecen a la sombra"
Lo sostuvo el Tribunal Federal de Paraná en la sentencia contra un albañil, un cuidacoches y un empleado de kiosco que llevaban marihuana
15 de enero 2018 · 07:52hs
Según contó uno de ellos, les iban a pagar 7.000 pesos a cada uno por transportar 86 kilos de marihuana. Es decir que cada uno iba a recibir menos de lo que valía en ese entonces un kilo de esa sustancia. Lo que ocurre siempre en el negocio narco: quienes corren el mayor peligro de caer detenidos, reciben la menor ganancia. Viceversa, los dueños del negocio quedan impune. Uno de ellos albañil con poco trabajo, otro cuida coches y otro empleado de un kiosco, en la ciudad de Corrientes, aceptaron la jugada.
Se subieron en la capital de la vecina provincia a un colectivo de la empresa Tramat, que tenía como destino la ciudad de Santa Fe, el 29 de marzo de 2016. A las 8, el micro transitaba hacia el sur por la ruta nacional 12 y en el cruce con la provincial Nº 6, en el Departamento La Paz, en Entre Ríos, personal de Gendarmería Nacional lo interceptó para un control vehicular rutinario. Después de realizar el control de los pasajeros, los uniformados hallaron en la bodega del micro 86 kilos de marihuana, dispuesta en 88 paquetes compactos, de forma rectangular, engrasados, envueltos en papel aluminio y nylon transparente. Estaban distribuidos en seis valijas y un bolso. Los tickets que tenía cada equipaje estaban tenían los números que se correspondían con los boletos de José Luis Escobar padre (de 44 años) e hijo (de 17), y Jorge Antonio Pérez (de 28), quienes iban acompañados por la pareja de uno de ellos, menor de edad.
En la sentencia que homologó el acuerdo arribado entre las partes, la vocal del Tribunal Oral Federal de Paraná, Lilia Carnero, sostuvo que "en este caso, está acreditado que los sujetos sabían que transportaban el estupefaciente para propagarlo dentro de nuestro país, desplazándose desde el norte –lugar de aprovisionamiento– según dan cuenta los datos reunidos en el procedimiento hacia la ciudad de Santa Fe, donde sería distribuida".
A su vez, se remarcó que la pericia química realizada por personal de Gendarmería Nacional, arrojó que la marihuana tenía una con concentración promedio de 3,41 de THC, suficientes para obtener a más de 838.557 dosis umbrales.
El mayor de los Escobar estaba con libertad condicional, en el cumplimiento de una condena de 15 años de prisión asaltos con armas de fuego en su ciudad natal.
Al momento de valorar el monto de la pena, el Tribunal observó que "los tres imputados son personas adultas, todavía jóvenes, de condición humilde, manifestado cada uno de ellos, estar arrepentidos de su accionar delictivo, justificándolo en las necesidades que les presentaba la dinámica cotidiana para hacer frente a sus gastos de subsistencia, sin tener ningún trabajo estable, pues dijeron trabajar en changas de albañilería 'en negro'. En este panorama surge evidente que los verdaderos empresarios de la droga contratan a personas vulnerables, permaneciendo a las sombras, con total impunidad".
Asimismo, Escobar padre "mencionó que por la faena ilícita le iban a pagar 7.000 pesos a cada uno, una vez ubicada la mercadería en destino, aclarando que no conoce a la persona que cargó los bultos en el micro".