Luego de una denuncia telefónica al 911, la Policía de Paraná fue a constatar que en una vivienda no se estuviera desarrollando una fiesta clandestina, ante un llamado por música a alto volumen, pero lo que encontraron fue un invernadero de marihuana casero y una caja con más de tres kilos de cogollos de cannabis sativa.
Fueron por música alta y hallaron un invernadero de cannabis
La Fiscalía ordenó el secuestro de la droga y buscará establecer si su destino era la venta o el consumo personal.
En horas de la madrugada de hoy, funcionarios policiales de la comisaría Tercera de Paraná fueron comisionados a una vivienda ubicada en calle Salvador Allende, a partir de una denuncia por música elevada.
Cuando llegaron al domicilio señalado, fueron atendidos por un joven de 19 años y su madre de 57. Los policías les consultaron si estaban con música en alto volumen, pero la señora les manifestó que no, que estaba todo tranquilo.
Uno de los uniformados advirtió, desde la puerta de la vivienda, que arriba de la mesa había una caja de zapatos abierta, con una sustancia vegetal en su interior, lo cual que despertó alguna sospecha, y además se sumaba que desde allí provenía un fuerte olor a marihuana.
Le consultaron a la mujer si podrían entrar a la casa para revisar y controlar que no hubiera gente escondida en el marco del desarrollo de una fiesta clandestina, ya que podrían haber bajado el volumen ante la presencia policial. La dueña de casa no tuvo inconvenientes, y lo que descubrieron fue otra situación ilícita.
A simple vista dentro de la mencionada caja de zapatos, constataron que había cogollos de marihuana. Luego los policías se dirigieron hacia una habitación y observaron una luz ultravioleta en una habitación interna. El joven les abrió la puerta y descubrieron que había montado un invernadero para cultivo de marihuana.
Se comunicó lo sucedido al fiscal en turno, quien dispuso la correcta identificación del joven y su madre, y que citen al lugar al personal de la Dirección Toxicología. Los efectivos de esta área llegaron y analizaron los elementos hallados: siete plantas de marihuana, y un sistema de iluminación y ventilación con temporizador. Estos elementos se incautaron, así como también el resultado lo producido en el invernadero casero de cannabis sativa: un total de 3,2 kilos de cogollos de marihuana.
Ahora se iniciará la causa judicial en la cual se intentará establecer si el destino de la droga era para consumo personal, para compartir con otros o para su comercialización.