Dos hombres quedaron detenidos como principales sospechosos del homicidio del ex juez de Paz de Bovril, Roberto Curá. De momento, se supo que la División de Homicidios de la Policía de Entre Ríos recolectó indicios que los vinculan con el hecho de sangre ocurrido el martes 23 de abril.
Bovril: dos detenidos por el homicidio de ex juez de Paz
La policía detuvo a dos sospechosos del homicidio del ex juez de Paz de Bovril, Roberto Curá, quine fue hallado en su vivienda maniatado y golpeado.
Las detenciones se produjeron anoche, luego de una orden librada por el fiscal Facundo Barbosa. Ahora, se espera que los sospechosos realicen sus defensas de rigor, aunque también tienen la posibilidad de abstenerse de declarar en esta instancia.
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Curá fue encontrado sin vida la mañana del martes por su esposa. Estaba maniatado y muy golpeado. Estaba en la zona del quincho de la vivienda, ubicada en calle Eva Perón, atado de pies y manos y ya fallecido. La víctima había sido juez de Paz hasta 2019.
La investigación
“El día martes nos anoticiamos de este hecho arrancando la mañana. Nos fuimos directamente hacia la localidad de Bovril a colaborar con el equipo de Homicidios. La señora del fallecido al despertarse y no encontrarlo a su marido se dirige hacia el quincho de la vivienda, donde se percata que estaba tirado, atado a una silla y con sangre”, indicó el jefe de la División Homicidios, comisario Miguel Delavalle, a Radio La Voz.
Si bien el hombre estaba atado en el quincho atado, el o los supuestos autores también habrían ingresado y recorrido la vivienda, porque una de las dependencias, un dormitorio que lo tenían destinado tipo para huésped, estaba desordenado. "Entendimos de esta manera que habrían llegado hasta ese lugar haciendo búsqueda de algún elemento. El resto de la casa estaba todo en orden. Como hipótesis uno podría pensar que recién habían ingresado buscando algo y tal vez algún ruido o algo los habría alertado, asustado, y habrían salido de la vivienda”, señaló.
Al momento de constatar faltantes, solamente faltaba un pistolón, viejo, de herencia y no pudieron constatar otro faltante.
Tras trabajar sobre diferentes sospechosos, “entendíamos que podía haber la participación de un perro que podría haber tenido el o los autores debido a indicios que se encontraron ahí en el patio, en la escena del crimen”.
En el quincho encontraron una pertenencia “que podría haberla dejado el o los autores”, por lo que el can policial “empezó a hacer el recorrido por el patio, sale por el costado, y finaliza a unos 500 metros en una esquina” donde habita una persona que ya había estado siendo investigada como sospechosa.
El miércoles se realizó el allanamiento de dicho domicilio y se dispuso la detención del dueño de casa y otro hombre que vivía con él, ambos mayores de edad.