La derrota que sufrió Patronato el domingo ante San Martín de Tucumán en el estadio Grella apagó la ilusión de dar batalla. El Rojinegro quedó distanciado a ocho unidades de los puestos de clasificación al reducido que otorgará el segundo ascenso a la próxima temporada de la Liga Profesional. Las matemáticas le da una mínima esperanza. No obstante, el sueño terminó. Así lo dejó en claro Rodolfo de Paoli.
Rodolfo de Paoli: "Quedamos sin chances"
“Estamos afuera del Reducido, estoy triste”. Con esa frase categórica el DT del Santo inició la conferencia de prensa pos caída ante el Ciruja. “Nos quedamos sin chance, porque ya no depende de nosotros. Quería competir como en la Copa, pero duele no entrar al Reducido”, añadió.
De esa manera Patronato encarará la recta final de la fase regular del campeonato de la Primera Nacional. En los últimos cuatro capítulos el elenco de barrio Villa Sarmiento buscará despedirse exhibiendo otra imagen. Esa será la misión del último campeón de la Copa Argentina. “Tenemos que pensar en lo que viene y vamos a tratar de terminar de la mejor manera. Duele porque superamos a un rival en el primer tiempo, pero en el segundo el equipo no jugó bien y San Martín ganó un partido sin ser superior”, se lamentó.
Continuando con el análisis del juego, agregó: “Me quiero quedar con la autocrítica real, jugamos mal”, reconoció. Luego agregó: “Superamos en el primer tiempo a un candidato al ascenso. Ellos la única vez que cruzaron la mitad de cancha nos golpearon”, subrayó.
El empate de San Martín en el cierre de la etapa inicial fue un mal trago que Patronato no supo digerir. Esto fue una constante del representante entrerriano a lo largo de la presente temporada. “Es un problema que no pude resolver, es mi cuota de responsabilidad de no dar en la tecla con esos detalles y las piezas”, remarcó, asumiendo responsabilidades.
Por otro lado, De Paoli evitó la polémica al momento de evaluar el rendimiento del árbitro Diego Ceballos. El colegiado fue blanco de las críticas al ignorar un claro penal para Patronato cuando el Rojinegro se imponía por la mínima diferencia.
“Si se tiene buena intensión se va a entender lo que digo, nunca tuvimos beneficios accidentales, El arbitraje no fue bueno o malo, pero hay una mano y el arbitro no la vio. De todos modos, no perdimos por eso”, aclaró.
Al ser consultado por su continuidad en la conducción técnica del equipo de barrio Villa Sarmiento, expresó: “Mi continuidad dependerá de quien gane las elecciones y cuáles sean sus proyectos y voy a estar donde me quieran como entrenador”, citó.
Siguiendo la misma línea, adelantó el espacio que gozarán los juveniles en lo que resta del campeonato: “No puedo pensar más allá del partido ante Temperley. Se ha pensado en el 2024, no sé si yo, pero si en el proyecto, con (Agustín) Ramos, (Valentín) Pereyra, (Santiago) Bellatti, pero a veces no es el momento y me parece injusto que los pibes se coman este garrón. Hay que ser coherente, pero se piensa más allá. Tengo ganas de hacer debutar a (Augusto) Picco, pero en qué momento, en qué circunstancias y con quiénes, se piensa más allá”, cerró.