La jornada es extensa. La rutina es agobiante. Desgasta física y emocionalmente. Demanda concentración, dedicación, perseverancia, pasión, compromiso. Ofrece satisfacciones, especialmente cuando los resultados son los deseados. A veces los frutos son superiores a los proyectados. Sorprenden hasta a los propios protagonista. Le sucedió a Lucas Miño.
Lucas Miño cerró el año con una medalla dorada
Lucas Miño conquistó la prueba de lanzamiento de disco en el Sudamericano U18 de atletismo. “Fue una locura”, indicó el oriundo de La Criolla.
El entrerriano compitió el pasado fin de semana por primera vez en un campeonato Sudamericano U18 de Atletismo. Llegó a este desafío internacional con el impulso necesario para proyectar en alto tras haber obtenido el título en la 57° edición del Nacional U18 que se llevó adelante a fines de septiembre en la pista del Centre de Educación Física N°3 Hugo Mario La Nasa, en Concepción del Uruguay.
El Ruso, como lo apodaron en La Criolla, una pequeña localidad ubicada en el departamento Concordia, salió a la pista Pedro Presti del Centro de Alto Rendimiento Deportivo de San Luis con el anhelo de ingresar en el podio. Sabía que, en esta ocasión la prueba iba a ser más competitiva que la que protagonizó en La Histórica.
El potencial del entrerriano lo llevó a aportar una de las seis medallas doradas que cosechó la delegación nacional el pasado fin de semana en el 27° Sudamericano juvenil. “Siendo realmente sincero, lo que sucedió fue una locura”, describió Miño, en diálogo con La Mañana de La Red.
La experiencia de Lucas Miño en San Luis
Lucas obtuvo al título al finalizar la prueba con una marca de 51,26 . De esa manera el representante de la escuela municipal de atletismo de la Subsecretaria de Deportes, que en la temporada 2023 conquistó el título en los Juegos Mundiales Escolares 2023 en Brasil, demostró consistencia al superar nuevamente la marca de los 50 metros con el implemento de 1.5 kilogramos.
Detrás del entrerriano se ubicaron Alessandro Borges Soares, de Brasil, con una marca de 50,95 metros. Mientras que el bonaerense Alexis Velázquez completó el podio al finalizar la prueba con un registro de 49,67 metros.
“Había ido con expectativas, pero no con tantas por el nivel de los atletas de Sudamérica. Pensaba en luchar por ingresar al podio porqué iba a estar peleada la competencia, pero me sorprendió conquistar la prueba. Me emocioné mucho por las horas de entrenamiento que metí”, relató el Ruso.
El reloj despertador marca el inicio de la jornada de Lucas a las 4.40. Se dirige desde su casa a tomar el micro que recorre La Criolla y Charrúa, un pueblo cercano a sus pagos. A las 7.30 inicia el cursado en la escuela agrotécnica Nº 152 Manuel María Calderón.
“En la escuela desayuno, almuerzo y meriendo”, remarcó Lucas, que tras salir del colegio se toma otro micro hacia el trabajo de su mamá. Luego su madre la traslada al Polideportivo Municipal de Concordia, donde realiza los entrenamientos de pista. “A las 22 llego a casa. Esta rutina la repito todos los días, de lunes a viernes”, señaló el adolescente, que el martes a primera hora llegó a su casa con la medalla que sumó a la vitrina personal.
“Cuando llegué a La Criolla no me recibió nadie porque eran las 4. Estaban todos durmiendo”, chicaneó Lucas. “El viaje de regreso fue muy largo. Salimos desde San Luis hasta el Cenard, en Buenos Aires. Desde ahí los atletas entrerrianos nos trasladamos hacia Concepción del Uruguay. Mi entrenador, Julio Piñero, me fue a buscar para traerme a casa”, repasó Lucas, que inmediatamente contó anécdotas que le dejó la experiencia en la cita continental.
“En el Sudamericano hice muchos amigos de varios países. Estos torneos nos permite vivenciar un choque cultural muy importante. Con mis compañeros de la delegación argentina hicimos relaciones con atletas de Colombia, Brasil, Ecuador. Sus comidas son raras. Algunos no toman mate. A las chicas de Ecuador les convidamos mate y se sorprendieron porque era amargo. Una de las chicas me dijo que estaba agrio cuando en realidad le había preparado el mejor mate de mi vida”, acotó el Ruso.
De vuelta a casa, la promesa del atletismo entrerriano proyecta la temporada 2025
El regreso al hogar natal marcó el inicio de las vacaciones para Lucas Miño. “Esta semana aprovecharé para dormir todo lo que pueda porque en breve comenzaré a preparar la pretemporada. Ahí arrancaría a entrenar en doble turno”, adelantó el Guri que el pasado 1 de noviembre celebró sus 16 años.
Luego sintetizó su excelente temporada. “El 2024 fue un año duro en si. Entrene muy fuerte, pero dio sus frutos. Estoy muy conforme con lo que pasó y se dio”, agradeció el campeón nacional y sudamericano U18 en lanzamiento de disco, que tiene por delante un año más en la categoría y una meta en el horizonte.
“Para el año que viene buscaré clasificar al Iberoamericano que se desarrollará en Paraguay. A ver que sale. Estoy buscando la marca, todavía no está el registro de referencia para clasificar, pero calculo que sería dentro del rango de los 55 metros. Estoy ahí”, indicó, con entusiasmó.