El paranaense de tan solo 16 años, Carmelo Retamar Brassesco , tuvo un 2023 soñado por donde se lo mire. Allá por septiembre hizo historia en el Mundial Juvenil la categoría Sub 18 de Zerbín de Bochas que se disputó en Argelia tras consagrarse campeón con el seleccionado argentino en Tiro con Precisión. En la final venció por 7 a 1.
Carmelo Retamar Brassesco, el UNO de Oro
De esta manera se ganó consideración de quedarse con el UNO de Oro por su gran temporada y notable crecimiento en el deporte. El entrerriano fue distinguido por el matutino como el deportista del año tras quedarse con el mundial de su categoría y además, compitió en cuatro estilos en total y se trajo dos medallas más. Ambas tras quedar tercero en la disciplina. En Tiros Rápidos Dobles y Duplas consiguió la presea de Bronce. Mientras que en Tiro Rápido Individual no pudo obtener podio.
Carmelo es entrenado por Luis Vernay; asistió junto a su familia y orientador a la entrega del galardón que tuvo lugar en el Centro Provincial de Convenciones. Tras la entrega de premios Carmelo Retamar Brassesco dijo a UNO. La verdad que estoy muy contento con el premio. Es una de las mejores formas de terminar el año”.
“El desarrollo del año fue muy completo. En lo deportivo fue el mejor de lo que va de mi vida. Tuve competencias provinciales y nacionales. Lo que me llevo a una convocatoria a la Selección Argentina de Bochas. Por suerte se me dio la chance de quedar para el Mundial, ya que el año pasado no tuvo la suerte de quedar por mi edad. Este año fui bien practicado y gracias a Díos tuve la suerte de estar y luego ir competir.
“Tuve un buen desempeño en el Mundial y pude ganar una medalla de Oro y dos de Bronce con el equipo nacional. La verdad estoy muy contento con año que tuve. Y cerrarlo con el premio de Diario UNO es lo mejor”.
“No esperaba el premio porque era todo sorpresa a lo hora de saberlo. Tampoco que sea Mariano Werner que lo entregue. Se lo grande que es como deportista y su gran año.
“Empecé a practicar bochas tradicional con mi padre, cuando tenía 10 años”, recordó. “Luego pasé al estilo Zerbín. En primera instancia Luis me hizo adquirir su sabiduría y en la Selección Argentina perfeccioné lo aprendido”, agregó Carmelo Retamar Brassesco.
Argelia es un país situado en África del norte, con costa en el Mar Mediterráneo y un interior en el desierto del Sahara. El 98% de su población es musulmana y el restante cristiana. “Fue bastante raro llegar y conocer el país. El panorama, la vestimenta, la cultura y las comidas son diferentes a como vivimos nosotros en Argentina”, mencionó el joven paranaense y que se anima a soñar.
“Ahora se viene un descanso de un par de meses para cargar pilas para lo que será el Mundial de Puerto Rico, en Bocas”, aseveró el paranaense que todavía tiene dos año para jugar en la categoría que ya es campeón del Mundo.
Todo un futuro dentro de las bochas. Un deporte poco difundido pero que sigue practicando con gran trabajo en la provincia de Entre Ríos. Con formadores en varios clubes.
Con futuro y presente
Carmelo Retamar Brassesco aseguró que pudo cumplir el sueño de vestir la camiseta de la Selección Argentina y, como si fuera poco, fue campeón mundial. “Representar a la Argentina es lo máximo”, contestó el paranaense que enfrentó y disfrutó de ver a los mejores del mundo en la disciplina, tales como Croacia, Argelia, Francia, Italia y Eslovenia.
Para conocer más en profundidad los detalles del estilo Zerbín, el entrenador Luis Vernay se explicó: “Es una bochita de bronce mucho más chica que la de bochas tradicional que se juega en Argentina. La jugabilidad es distinta, la cancha tiene mucho más metros y si sale de ese diámetro la bocha se va fuera de la cancha. Es decir, en el partido terminan menos bochas que las que iniciaron el juego”. En individual se juega con cuatro bochas por jugador, pero en parejas se juega con tres bochas por jugador. Después el juego es similar: se arrima y se bocha igual que en las bochas tradicionales, pero en el estilo Zerbín la zona de juego es aún mayor.
“Carmelo practicó en canchas de 24 metros y fue a jugar a una de 27,5”, destacó su entrenador que estuvo presente en la entrega de premios. Este gran presente también hizo que gane el Olimpia de Plata por las bochas. Un logro que hacía años no quedaba dentro del deporte a nivel provincial. Un chico pudo quebrar la racha y también ser reconocido por muchos.