El Día Internacional del Síndrome de Asperger se celebra mañana, en conmemoración a la fecha de nacimiento de Hans Asperger, el psiquiatra austríaco que describió el cuadro, que fue el 18 de febrero de 1906. El objetivo de esta fecha es dar visibilidad y promover una acción política y social para la reivindicación y promoción de los derechos de las personas con Síndrome de Asperger y sus familias.
Día Mundial del Asperger: habrá acciones de concientización
El síndrome de Asperger se incluye dentro del trastorno del espectro autista (TEA).
Desde las redes sociales, Asociación Civil de Autismo, Asperger y Neurodiversidad de Entre Ríos (NeuroCEA) realizará una campaña de sensibilización y concientización sobre este día, ya que la información sobre el tema muchas veces es clave para un diagnóstico temprano y para promover acciones de inclusión e integración.
En este marco, Amarú Méndez, referente de NeuroCEA, contó que el síndrome de Asperger “es una condición de vida que está dentro de la rama del espectro autista”. Se caracteriza por tener un repertorio de intereses y actividades restringido, estereotipado y repetitivo y sobre este punto, precisó: “Básicamente las personas con este síndrome tienen un coeficiente intelectual un poco más elevado que una persona neurotípica. Tienen intereses particulares, a partir de los cuales son muy objetivos: si por ejemplo, les gustan los dinosaurios, van a saber todo sobre el tema. No es un conocimiento general, sino que son temas específicos de su interés. Por lo general no te miran a los ojos. Y con respecto a los ruidos, van variando, hay muchos que son hipersensibles y otros que no tanto”.
Por otra parte, señaló que habitualmente se presta atención a los niños, pero destacó que en la actualidad son muchos los adultos que pueden acceder a un diagnóstico que no pudieron tener antes, porque había mayor desconocimiento sobre el tema: “Después de muchos años que se empezó a visibilizar la condición de lo que era el autismo, en todas las ramas. Se abrió mucho más el abanico; el espectro es mucho más amplio, y hoy en día contamos con profesionales que hacen las evaluaciones a muchos adultos, que esto fue también un impacto muy importante que nosotros trabajamos dentro de la Asociación”.
En este marco, precisó: “Hoy en día hay mucha información y herramientas para trabajar con niños, con estimulación temprana y demás, pero había muchos adultos que estaban con esa duda, que se sentían como raros, y pudimos llegar a una gran parte de la sociedad para que pudiera al fin acceder a un diagnóstico. La mayoría son diagnosticados con Asperger, y siempre fueron más hombres que mujeres. Poder llegar a esta cantidad de personas para nosotros es muy gratificante, porque ellos pudieron encontrarse, saber quiénes eran, encontrar su identidad, saber por qué se sentían de esa forma. Y las familias también pudieron comprender un montón de cuestiones que esa persona sentía. La verdad que es súper favorable también contar con un equipo, que lo tenemos dentro de la Asociación, para las personas que tienen dudas y que se quieran hacer un diagnóstico”.
Con respecto al diagnóstico en bebés y niños pequeños si hay sospechas de alguna manifestación del espectro autista en general, Amarú recomendó consultar a un especialista, pero aclaró: “Hay que estar atentos a lo que dice el pediatra, pero también es importante que si no le da la importancia a nuestra consulta, no nos quedemos con lo que nos dijo, que busquemos otras alternativas. Podemos hacer una consulta con un psicólogo, con un psicopedagogo. A veces el pediatra dice que hay que esperar, que el chico ya va a hablar, que tiene sus tiempos y demás, pero una interconsulta no viene mal para que la familia se pueda quedar tranquila. Y en el caso de que se llegue a un diagnóstico dentro del espectro autista, lo bueno de todo esto es que siempre hacemos foco que la detección temprana, que es fundamental para que puedan arrancar con su terapia”, expresó.
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Asimismo, subrayó; “Si arrancamos con terapia desde más chico, el día de mañana van a poder llevar una vida totalmente normal, que es en lo que hacemos siempre hincapié: mientras más temprano arranquemos la terapia, esto puede modificar toda la vida de esa persona”.
Sobre este punto, explicó: “La persona con síndrome de Asperger o alguna otra condición del espectro autista necesita de diferentes apoyos, como psicóloga, psicopedagoga, terapista ocupacional, acompañante terapéutico, una maestra de apoyo en una escuela. Todo eso es para que la persona pueda crear independencia; en el caso de que sea más chico, crear una independencia y poder manejarse el día de mañana con total normalidad, enfrente de la vida”.
Desde la asociación NeuroCEA están abocados al acompañamiento de las familias. Quien desee contactarse con NeuroCEA, se puede comunicar por Facebook: Neurocea; e Istagram: @neurocaer; o vía WhatsApp: +5493435311039.