El Alzheimer es una de las enfermedades sin cura hasta hoy que afecta a una parte importante de la población. En Concepción del Uruguay se avanza con actividades preventivas sobre esta problemática de la salud mental.
Actividades de prevención y conciencia sobre Alzheimer
El pasado 21 de septiembre se celebró el Día Mundial del Alzheimer, una jornada que sirve para poner de relieve la importancia de las actividades que ayudan a prevenir esta enfermedad, al tiempo que también se exponen los últimos avances en materia científica para abordar esta problemática de la salud mental que aqueja a millones de personas.
En el marco de esta fecha, en Concepción del Uruguay se vienen desarrollando una serie de actividades que buscan poner de relieve la necesidad de mantener el cerebro ágil para tener una buena vejez.
Agustina Leites e Iris Martínez son técnicas en psicogerontología, y trabajan hace mucho tiempo en La Histórica junto a personas mayores sumando técnicas y herramientas que permitan generar las condiciones que se necesitan para prevenir enfermedades como el Alzheimer.
“Hace más de diez años que coordinamos talleres de estimulación de la memoria en Concepción del Uruguay, y a lo largo de todo este tiempo también nos hemos dedicado a trabajar en la promoción y prevención de la enfermedad de Alzheimer, y en cada mes de septiembre, organizamos actividades adicionales donde buscamos que las personas mayores que trabajan con nosotros, que son un centenar, salgan ellos mismos a concientizar sobre todo lo que implica el Alzheimer”, detalló Agustina Leites, en diálogo con UNO.
Estas dos profesionales trabajan sobre una problemática que hoy afecta a más de medio millón de personas en Argentina, y remarcan la importancia de concientizar sobre la necesidad de prevenir, trabajar para mantener a pleno las facultades mentales, o recuperar algún espacio de la memoria que comienza a fallar.
“Se trata de una enfermedad que no tiene cura, que afecta a la gente mayor, en una sociedad donde el envejecimiento se prolonga cada vez más. Por eso la importancia de ocuparse, de concientizar, porque esto no atraviesa solamente a quien padece la enfermedad, sino también a su familia, genera incertidumbre, y todo esto suma temores cuando se presentan los casos“, señala Leites.
A través de los años ha ido observando una evolución importante en la concientización que los adultos mayores tienen sobre la necesidad de sostener un entrenamiento del cerebro como parte de las actividades cotidianas que se hacen necesarias para mantenerse en condiciones mentales óptimas.
“Cada vez más gente se da cuenta que no sólo hay que mantener activo el cuerpo para que no se enferme, es necesario ejercitar de forma constante el cerebro para mantenerse activo y en plenitud, eso está cada vez más marcado, y no solo se ve que realizan estas actividades con nosotros, sino que sabemos que también llevan adelante otras actividades que les permiten prevenir enfermedades y les ayudan enormemente en su estado de ánimo y salud mental”, remarca Leites.
En este mismo sentido, remarca que “todo esto genera mucho miedo, por eso es necesario el respaldo, el apoyo ante la falta de información, las familias necesitan ser acompañadas, escuchadas, y también los adultos mayores que, deben saber que ante un diagnóstico como este, no están solos”.
En este sentido las profesionales destacan que “el primer golpe es aceptar la enfermedad, allí la familia se tambalea y necesita apoyo para comenzar a elaborar lo que está sucediendo, a partir de allí es fundamental prestarle atención a todos y ayudarlos a resolver cuestiones muy difíciles que les están sucediendo. La gente se acerca cada vez más a este grupo y esto es muy bueno porque estamos para ayudar”, detalla.
Prevención
Unos de los primeros pasos para la prevención de este tipo de enfermedades es hacer los cambios necesarios para adoptar un estilo de vida saludable, “haciendo ejercicios, estimulación de la memoria, con talleres cognitivos que fomentan este trabajo o impulsan a la realización de nuevas actividades, aprendizajes, cosas que nunca se hicieron antes y siempre quisieron hacer, no dejar de aprender de nunca es una cuestión central en este proceso”, afirma Leites.
La incorporación de actividades de distinto tipo para la estimulación de la memoria suma adeptos entre los adultos mayores, sin embargo, la convocatoria no tiene la misma respuesta en varones que en mujeres.
Los varones son todavía minoría en los talleres, se acercan menos, pero de a poco se van sumando, ellas no tienen problemas, se suman, participan, colaboran y son el alma de muchas de las actividades, remarca Agustina dando un pantallazo de lo que se ve en cada encuentro.
Los talleres involucran diferentes tipos de actividades, que van desde ejercicios, juegos relatos de vida hasta la redacción de historias propias o ficcionadas.
“Todo lo que los ayude a mantenerlos estimulados mentalmente viene bien, incluimos muchos festejos, celebraciones y conversaciones de todo tipo, todo esto es importante, porque hasta no hace mucho tiempo sólo era importante el envejecimiento físico, sin darse cuenta que el cerebro también envejece y mantenerlo activo es fundamental para sostener una buena calidad de vida en estos años”.
Actividades
Todos los años se hacen actividades especiales para el Día del Alzheimer para concientización y prevención de la enfermedad, este año hubo charlas dictadas por profesionales para los asistentes a los talleres y para el público en general.
“Este año volvimos a centrarnos en intensificar todas las actividades durante el mes de septiembre, hicimos una caminata con todos los adultos mayores que participan de nuestros talleres, ellos mismos repartieron folletería y concientizan sobre la problemática. También sumamos la proyección de una película que trata sobre el tema. En el Centro de Atención Primaria de la Salud, Giacomotti, se dictará una charla a cargo de profesionales con mayores precisiones sobre la enfermedad, y tips para tener en cuenta a la hora de prevenir”, destacan.