El pegado amplio fue sostenido incluso por el candidato a intendente de Paraná Adán Bahl, pese a que él pudo haber reclamado la exclusividad de la lista dos, Bahl explicó que de esta forma además se “suma hacia arriba”, es decir que se garantizan más votos para la fórmula de gobernador y vice. Eso es así porque, en caso contrario, es probable que quien vota una boleta corta (solo con cuerpos a intendente y concejales) pueda no votar en la categoría de gobernador y diputados, porque para hacerlo debería cortar la boleta larga del gobernador y extraer algunos cuerpos para combinar con su elección de intendente y concejal.
El "pegado amplio" del oficialismo no cuenta para los candidatos a senador por Paraná
Todos los candidatos a intendente de Creer Entre Ríos podrán ir con la boleta de Bordet. Pero los postulantes a senador no, salvo en Tala y Federación.
27 de febrero 2019 · 22:02hs
Por ahora el gobernador Gustavo Bordet tiene decidido, según aseguran en su entorno, que todos los precandidatos a intendente que se hayan anotado en las PASO del frente Creer Entre Ríos puedan pegar su boleta con la de candidatos a gobernador, vice y diputados provinciales que él encabeza. Si bien Bordet no lo había dicho de manera explícita antes de las elecciones (tal vez para evitar una avalancha de presentaciones mayor a la que hubo), se entendía que esa iba a ser la postura para garantizar una interna amplia como era el objetivo que el mandatario enunciaba. Por el contrario, mantener un criterio restrictivo en el pegado, como ocurrió en las elecciones anteriores, significaría dejar abierta la posibilidad de que se cuestionara la igualdad de condiciones en la participación.
La contrariedad se produce a la hora de analizar las posibilidad de pegado que tienen los candidatos a senadores provinciales. La ley electoral vigente (Castrillón) establece que se denegará la pretensión de oficializar candidaturas si la postulación de gobernador y vicegobernador no fuera hecha conjuntamente con, por lo menos, 15 candidatos a senadores y una lista completa de Diputados. Así, esa ley aprobada en 2005 –en los inicios de la fractura peronista que dio origen a la recordada lista 100– le deja abierta al gobernador la chance no llevar candidatos en dos departamentos; pero en 15 debe tener candidato propio. Y en esta oportunidad, esos departamentos son Tala y Federación, por decisión de Bordet.
En esas dos jurisdicciones la lista dos no tendrán candidato al Senado, pero como pegará con todos los candidatos a intendentes, y estos a la vez pegarán con todos o algunos candidatos a senadores; en el cuarto oscuro habrá igualmente boletas largas con todos los cuerpos correspondientes a las categorías electorales en disputa. El caso que puso en evidencia la situación es el de Paraná, donde los anotados para disputar la categoría senador en el frente Creer Entre Ríos son tres: el intendente de Hasenkamp Juan Carlos Kloss, el periodista Miguel Ruberto y el presidente del IAPV Marcelo Casaretto.
La decisión de Bordet es llevar como candidato a Kloss, cuyo nombre surgió del acuerdo de los intendentes justicialistas de Paraná Campaña en conjunto con el vicegobernador Bahl. En el bordetismo aseguran que no existe mala predisposición con Casaretto, que es funcionario actualmente; ni con Ruberto, quien respondió con decisión militante al llamado de Bordet a involucrarse en la vida partidaria. Pero lo cierto es que en la mayor jurisdicción dentro de la provincia, un departamento con más de 300.000 electores, la elección del candidato a senador no se hará en condiciones de igualdad. “El armado final es producto de un trabajo político, y en esta caso es Kloss”, indicó la ministra de Gobierno, Rosario Romero, quien acotó que de existir el sistema de boleta única no se darían estas discriminaciones.
De no aprobarse ese mecanismo, que Bordet, promete volver a impulsar en caso de ser reelecto; bien podría realizarse una modificación parcial a la desactualizada ley Castrillón. En clave de interna podría pensarse que Ruberto y Casaretto asumen una adversidad por la redacción de una ley a la que en su momento se tildó de parcial en función de la interna de entonces del justicialismo.