Un policía fue asesinado de un disparo en la cabeza este martes en Rosario, en el marco de un gravísimo hecho de violencia armada que se registró por la noche en el ingreso a la guardia del hospital Provincial.
Rosario: ingresaron a un hospital para sacar a un preso y mataron a un policía
El subinspector Leoncio Bermúdez falleció en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez minutos después y, según las imágenes del hecho, fue atacado cuando salió del destacamento para fijarse qué ocurría en el interior del hospital. En una fracción de segundo, uno de los gatilleros se lo chocó de frente al agente, le dio varios tiros y huyó. El caso es investigado por la fiscal Gisela Paolicelli.
El homicidio se registró minutos antes de las 22 sobre el sector ubicado sobre calle Zeballos al 400, donde sobre la vereda hay una garita policial fija.
LEER MÁS: Secuestran drogas, armas y dinero en barrio Paraná XVI: hay tres detenidos
El ataque
Según consignó La Capital, el ataque comenzó poco antes de las 22, en el hospital de Leandro N. Alem al 1400, cuando ingresó un móvil del Servicio Penitenciario con un detenido que iba a ser internado. En el acceso por Zeballos, según trascendió a través de los primeros relatos, cuatro jóvenes pidieron pasar al baño y no les habrían permitido el ingreso, tras lo cual irrumpieron abriendo fuego.
Supuestamente con la intención de rescatar al preso internado, protagonizaron una balacera en la que una enfermera resultó herida en una pierna y un policía recibió un disparo en la cabeza y fue trasladado al Heca en estado crítico. El uniformado, identificado como subinspector Leoncio Bermúdez, murió poco después.
Sin alcanzar a consumar su objetivo, los delincuentes huyeron en un Fiat Uno gris por Zeballos. Personal policial se encontraba en la noche de este martes revisando las cámaras del hospital y de la zona para intentar definir el itinerario de fuga que utilizaron los atacantes.
El ministro de Seguridad provincial, Claudio Brilloni, se hizo presente en el lugar poco después del ataque y confirmó que se trataba de cuatro agresores, luego de que inicialmente circulara la versión de que habían sido solamente dos.