"No pude ni siquiera despedirme. Nuestra despedida fue con un 'buenas noches'. Yo no lo vi cuando se fue el sábado temprano a la mañana. Por eso, la última vez que lo vi fue el día anterior", reveló Analía Cersofio, esposa de Fernando Adolfo Vince, el empresario de 44 años, oriundo de Cerrito, que murió la mañana del 8 de enero de 2022 en un choque en la Ruta Nacional N° 12. Entonces, el Gerente del Frigorífico Flor de Ceibo, ubicado en El Palenque, iba en su vehículo a su trabajo y fue chocado por Nicolás Sanabria, hoy de 33 años, quien venía alcoholizado.
Muerte de Vince en Ruta 12: el juicio a Sanabria ingresó en su etapa final
En la tercera jornada de juicio declararon seis testigos, entre ellos la esposa de la víctima y la pareja del imputado. Un forense corrigió un cálculo de alcoholemia.
Por Gonzalo Núñez
Este jueves se desarrolló la última jornada de testimoniales. En total comparecieron seis personas, tres por la Fiscalía y la querella; y tres por la defensa. Las más importantes fueron la esposa de la víctima, quien contó el sufrimiento de la familia; el médico forense Juan Pablo Bertozzi, quien rectificó su cálculo sobre alcoholemia retrospectiva (afirmó que Sanabria tenía 1,77 gramos de alcohol en sangre y no 1,62, como dijo el martes); y también fueron relevantes las palabras de la pareja de Sanabria, Daiana Burtoboy, y la psicóloga María Fernanda Núñez.
El debate se realiza ante el juez Rafael Cotorruelo. En la primera jornada de debate, Erik Zenklusen, representante de la fiscalía, solicitó cinco años de prisión efectiva por homicidio culposo agravado y diez años de inhabilitación para conducir. Por su parte, Flavio Steven, abogado de la querella, pidió cinco años y medio de cárcel y diez años de inhabilitación. En contraste, la abogada Corina Beisel argumentó que durante el juicio se demostrará la inocencia de su defendido, apelando al beneficio de la duda.
El lunes 23 el juicio concluirá con los alegatos de clausura. Luego el juez definirá si condena o absuelve al imputado.
"Quiero que vaya preso"
Analía Cersofio es profesora de Matemáticas y Física en Cerrito. Era la esposa de Vince desde hace más de dos décadas, con quien tuvo dos hijos. Su testimonio fue al borde del llanto. Reveló que lo vio por última vez la noche previa al choque, cuando se dieron el beso de las buenas noches. Entre otras cosas, manifestó que Sanabria truncó los proyectos de Vince y su familia: "Él trabajaba y estudiaba. Quería ser Procurador. Estudiaba en los momentos libres".
"Espero que haya justicia para Fernando, porque no merecía un final así. Por una irresponsabilidad de una persona que tomó alcohol en exceso. Todos sabemos lo que el alcohol al volante provoca,. Él tenía muchos proyectos; quería hacer cosas y le truncó todo. Él era muy responsable por su vida y la ajena. Jamás iba a manejar con alcohol; él siempre respetaba eso. Y quiero justicia por él. Siempre digo que esto no fue un accidente porque esto se hubiera podido evitar. Porque un accidente es cuando uno hace algo de forma involuntaria", manifestó.
Más alcohol en sangre
A su turno, el médico forense Juan Pablo Bertozzi declaró por segunda vez en el juicio. El lunes dio cuenta que realizó el cálculo de la alcoholemia retrospectiva, la cual dio que Sanabria tenía 1,62 gramos de alcohol en sangre. La que se probó en la practica dio 1,19. Pero este resultado se obtuvo con la extracción de sangre que se realizó a las 11.40 de la mañana. Es decir, cuatro horas después de la colisión fatal. Por ello, se acudió a este especialista para estimar su intoxicación alcohólica al momento del hecho.
Este jueves, Bertozzi rectificó la cifra y fundamentó que hubo un error: su cálculo fue por tres horas y no a cuatro horas del choque. "Utilizando la variante estándar, la alcoholemia teórica retrospectiva al momento del hecho habría sido de 1,77 de alcohol", se corrigió.
En ese marco, el especialista explicó al juez que su cálculo se basa en los elementos proporcionados en la investigación (la hora del choque, la hora de la última posible ingesta y la hora de extracción de sangre, entre otros puntos). Y refirió que el número final podría variar en algunos casos, pero que, por lo general, la eliminación del alcohol en una persona sana y de 70 kilos es "constante". "La eliminación es de 15 miligramos de litro por minuto", expuso.
Una empresa perjudicada
En esta oportunidad también declaró una trabajadora de la empresa en la que Vince se desempeñaba como Gerente. Lo describió como una persona muy responsable, planificadora y organizada. Dijo que se ocupaba de casi todo: desde el pago de salarios a los 40 trabajadores hasta del contacto con los proveedores y bancos. "La falta de él nos perjudicó mucho en el sentido administrativo y de trabajo. Nos costó mucho hasta que nos recompusimos. Él tenía el control de todo. Si se rompía o faltaba algo, se ocupaba. Tuvimos que arrancar prácticamente de cero", concluyó la mujer.
Sanabria, muy afectado por el choque fatal
La parte final de las testimoniales fueron para la defensa de Sanabria. Primero lo hizo su pareja Daiana Burtoboy, quien dijo que comenzaron una relación luego del accidente. Contó que durante estos años lo ve muy afectado por el choque que terminó con la vida de Vince. "Luego del accidente vi a una persona apagada. A veces, cuando se enteraba de algún otro choque se ponía mal. Por las noches, cuando era el momento del descanso, lloraba", relató y agregó que se encuentra en terapia con una psicóloga.
También destacó que su pareja asumió el rol de padre, ya que ella tiene dos hijas de una relación previa y que él la ayuda en la crianza. También contó que desde el siniestro evita ir a Cerrito ya que se siente "señalado" por la gente y ello lo angustia.
Luego fue el turno de Jorge Venturino, asesor externo de la empresa Indavisa, de Hernandarias, en donde trabaja Sanabria. Dijo que antes del hecho, el acusado era extrovertido, sociable y una persona con un gran interés por el conocimiento; pero que todo cambió desde aquel 8 de enero de 2022.
Por último, depuso la psicóloga María Fernanda Núñez, quien lleva adelante el proceso terapéutico de Sanabria. "Nicolás ha ido pensando cuáles han sido las consecuencias de su accionar en esto de poder ubicar las consecuencias, el daño ocasionado y sobre todo asumir una responsabilidad subjetiva en relación al hecho. Él puede dar cuenta de que su accionar produjo un daño a terceros. Puede reflexionar respecto de esto y se pone en ese lugar de terceros".
—¿Le importa lo que ocurrió o le da lo mismo? — preguntó la abogada Corina Beisel.
—Sí, le importa mucho y, sobre todo, también ha tenido comportamientos de evitar tener contacto para no molestar a la familia de la víctima. Siente mucha pena y mucha vergüenza respecto de esto.