Facundo José Siegfried, de 24 años, reconoció tres acusaciones que lo dejarán encerrado en la cárcel por lo menos hasta 2022, porque recibió cuatro años de prisión, pero ya viene cumpliendo preventiva desde 2018, cuando cayó detenido por vender droga y tratar de matar a un hombre. Sin embargo, lo que más le debiera preocupar al joven es su próxima cita con el Poder Judicial. En breve será sometido a un nuevo juicio por el delito de Femicidio, que tiene una pena única de prisión perpetua.
Condenaron a Facundo Siegfried y ahora espera ser juzgado por femicidio
Foto UNO
Esta semana el juez de Garantías Mauricio Mayer aceptó el acuerdo de prisión preventiva que presentaron el fiscal Ignacio Aramberry y el defensor Joaquín Pérez.
La historia de Siegfried con la Justicia viene siendo cada vez más frecuente, ya que desde septiembre de 2018, cuando cayó por tres delitos viene siendo noticia.
El 4 de septiembre de ese año lo detuvieron por una balacera contra una vivienda y en el allanamiento le encontraron droga para la venta; el 25 de ese mes, mientras debía haber estado con prisión preventiva domiciliaria, asesinó de un disparo en la cabeza a su novia Alejandra Silva, según la acusación fiscal.
Tal cual publicó UNO la semana pasada, Siegfried está alojado en la Unidad Penal N° 1. Luego de ser detenido por narcomenudeo, le dieron el arresto domiciliario en una casa del barrio El Morro, donde mató a la joven de 28 años; un par de meses después volvieron a darle el beneficio, y se comprobó que violaba la medida porque salía de la vivienda.
Uno de los hechos imputados ocurrió el 4 de septiembre de 2018 alrededor de las 19, cuando Siegfried fue junto a su hermano Martín y otras personas de identidad desconocida a una vivienda del barrio 4 de Junio, en calle Francia, pasando Circunvalación. Irrumpieron en la misma fuertemente armados, donde estaba un hombre con su hija, a quienes les apuntaban mientras les gritaban: “¿Dónde está Julio? ¡Nos sacaron la falopa!”.
Luego salieron de la casa y efectuaron disparos contra el frente de la misma, y finalmente huyeron del barrio en el Honda Fit gris conducido por Facundo Siegfried. Los llamados al 911 de las víctimas y vecinos alertaron a la Policía, que iniciaron una persecución que finalizó en la vivienda de los acusados, en calle Zavalía y Santamaría de Oro, en el barrio La Milagrosa. Con la autorización judicial allanaron la casa, donde los detuvieron, pero además encontraron droga.
Por esto, se supo que tiempo antes personal policial de Toxicología los estaba investigando por narcomenudeo, por lo cual las pruebas de esta pesquisa se sumaron a lo hallado en la vivienda: se trataba de marihuana y cocaína fraccionadas en bolsas de nailon: uno con cinco gramos de cocaína, 32 con 47 gramos de marihuana, otros tres de cannabis que pesaron cuatro gramos y otra bolsa más con 168 gramos de clorhidrato de cocaína. Estaba todo en una caja negra con varios celulares.
Tras mencionar las principales evidencias, el fiscal dijo que las mismas dan cuenta de que en la casa de Siegfried “funcionaba la actividad ilícita y la frecuencia con que concurrían diversas personas a la vivienda del imputado, sin que tenga alguna actividad lícita que lo justifique, y se observaba cambio de productos por dinero”.
Además, se remarcó que de las pericias a la droga incautada se confirmó que se trataba de clorhidrato de cocaína, que estaba cortada con novocaína, así como las que corroboraron la presencia de cannabis sativa. “Tenía esta empresa delictiva montada en su domicilio”, aseveró Aramberry.