A inicios de este año, la suboficial de la Policía provincial que trabaja en la comisaría Séptima de Paraná, Carla Ledesma, se encontraba aterrada por la violencia ejercida por su expareja. Contactó a mujeres que ayudan a otras que se encuentran desesperadas: “Necesito ayuda, no sé qué más hacer”, decía. Hubo denuncias hasta que logró su detención y posteriores medidas de restricción judicial. “Nacía para ser libre, no asesinada”, posteó en Facebook. Lo que ella ni nadie de su entorno esperaba era que su actual pareja sería quien, unos meses después, atentaría contra su vida en lo que por ahora es un intento de femicidio a balazos y puñaladas en la vivienda de San Benito.
Balazos, puñaladas y sangre en toda la casa de San Benito
Por José Amado
Fue poco después de la medianoche del miércoles cuando Brian López desató su furia femicida contra Carla, de 36 años, la sobrina Eliana, de 25, y la madre, de 67. La pareja estaba viviendo en la casa de calle Basavilbaso de la ciudad de San Benito, que compartían con la sobrina de la mujer. En otra vivienda del fondo viven el hijo de Carla de 14 años junto a su madre.
Por el momento nadie sabe cuál fue el motivo de la discusión que llevó a López a agarrar un cuchillo de la cocina y asestarle varias puñaladas en el cuerpo, y luego agarrar el arma reglamentaria de la mujer y dispararle en la cabeza. Cuando Eliana intentó ayudar a su tía, también fue a tacada con dos balazos en la zona abdominal. Corriendo desde el fondo llegó la madre de Carla, a quien López también intentó herir, le disparó pero las balas le pasaron cerca a la señora.
Las detonaciones de la pistola calibre 9 milímetros alarmaron a todo el barrio, algunos vecinos llamaron a la Policía y otros se asomaron a ver qué sucedía. Varios de ellos observaron a López que salía de la vivienda de Carla, corriendo con una pistola en una mano.
Cuando llegaron los primeros policías, encontraron a las dos mujeres heridas en un escenario dantesco y desesperante. Las víctimas fueron trasladadas de inmediato al hospital San Martín en ambulancias. Ingresaron a Emergencias y de allí directamente al quirófano. Carla fue asistida por las heridas de arma blanca y Eliana por las lesiones en sus órganos que causaron los balazos. Ambas permanecían anoche internadas en Terapia Intensiva.
En el lugar trabajó el personal de la División Homicidios, que relevó testimonios y toda la Policía en su conjunto se abocó a la búsqueda de López.
Según se pudo reconstruir de los pasos que dio el autor de los disparos, recorrió unas siete cuadras hasta la casa de un vecino que, supuestamente por temor, lo ayudó a esconderse unas horas y le dio ropa para que se cambiara. Desde allí, en horas de la mañaña López se fue a su trabajo en la Cooperativa de Agua Potable de San Benito, donde estaba trabajando gracias al contacto con un pariente. Le dijo a sus compañeros lo que había hecho y les pidió ayuda para ir a entregarse.
Lo llevaron hasta una remisera de la localidad, se subieron a un auto y desde allí se dirigieron hacia Paraná. Un grupo de policías los observó y comenzaron a seguir el remís. Como sabían que el hombre podía estar armado, fueron avisando a otras áreas para montar un operativo de detención sin que se produzcan disparos con peores consecuencias. Cuando se dirigían hacia el centro de la ciudad, sospecharon que iban a Tribunales. Allí se montó una guarda con personal de Investigaciones y el defensor oficial Jorge Sueldo. El calle Laprida, frente a Tribunales y a la Casa de Gobierno, interceptaron el auto y detuvieron a López. Tenía el arma reglamentaria de Ledesma, que entregó sin problemas. Rodeado de policías y de la prensa, dijo al pasar que no recordaba nada de lo que ocurrió en la noche.
En tanto, el personal de la Dirección Criminalística trabajó en la escena del crimen, donde encontraron rastros de sangre por todos lados: en las dos habitaciones y en la cocina comedor; había vainas servidas y proyectiles que impactaron en las paredes y en muebles. Aún no se puede establecer fehacientemente la dinámica del ataque ni dónde comenzó, según se informó a UNO, hasta tanto esté el informe de los peritos de la División Rastros.
En la casa del vecino de San Benito a donde se dirigió López tras el ataque se secuestró la ropa que tenía puesta al momento del hecho, que será analizada en busca del rastro de pólvora.
El director de Investigaciones, Ángel Ricle, le dijo a Radio de UNO (88.7) que el agresor tiene “antecedentes policiales y judiciales”.
El fiscal Leandro Dato imputará en las próximas horas a López por el intento de homicidio de las tres mujeres, en el caso de Carla Ledesma agravado por violencia de género y por la relación de pareja. Luego se solicitará la prisión preventiva en la Unidad Penal N° 1, medida cautelar que más que seguro será impuesta por el Juzgado de Garantías.