Si bien hay algunas excepciones, todavía resta mucho para habilitar la práctica de las disciplinas deportivas, sobre todo en las actividades de conjunto. Este es el caso del fútbol 5, un rubro que en Paraná cuenta con cerca de 20 complejos y cuyos dueños están preocupados por la situación que atraviesan. Hace más de dos meses que no reciben ningún tipo de ingreso, aunque deben cumplir con las erogaciones habituales. Por eso los empresarios elaboraron un protocolo de 27 hojas con una serie de medidas de seguridad sanitaria y que presentaron a las autoridades de la Municipalidad de Paraná. Además, ayer fueron recibidos por José Gómez, secretario de Deportes de la Provincia. De la reunión salieron conformes a medias, ya que el dirigente les manifestó que están lejos de volver, aunque comprometió su ayuda para que el cimbronazo económico no sea tan duro.
Paraná: un guiño para seguir esperando el regreso
Por Mauro Meyer
“Todo lo que son actividades deportivas va a ser lo último que se va a habilitar. Lo que hablamos con el secretario fue sobre una ayuda económica en cuanto a los gastos que tenemos por el mantenimiento de los complejos. Se comprometió a charlar con los entes recaudadores de impuestos para que tengan contemplaciones. Nada más que eso. Le presentamos el protocolo, pero no depende de la Provincia sino de la Nación”, afirmó Néstor Capdevila, propietario de un par de complejos, en diálogo con Ovación.
“Todos estamos prácticamente en la misma situación. Los gastos fijos son importantes y estamos viendo que la apertura se puede estirar para agosto o setiembre con mucho viento a favor. A esa fecha se va a complicar aún más. Uno o dos meses podemos sobrevivir, pero más no creo. El panorama es complicado. Quizás mejora la situación en algunos días, pero es todo incertidumbre”, agregó. Capdevila también afirmó que tiene un grupo de WhatsApp conformado por 18 dueños sola Automovilismo mente en Paraná, aunque “en Entre Ríos hay alrededor de 400 lugares que seguramente pasan por la misma situación”. “Lo concreto es que ahora no tenemos que insistir mucho por la parte deportiva, sino en buscar alguna ayuda económica”, reconoció.
Por su parte, Roberto Sachs también coincidió en que todo “está muy verde, como el césped de las canchas”. “Gómez no nos dio plazos, porque esto va para largo. Queríamos juntarnos para hacer un poco de ruido y poder ser escuchados. El secretario se comprometió a ayudarnos y se van a mandar cartas a todos los entes. Desde lo que es electricidad, alquileres, a ATER y a los bancos para gestionar algún crédito para pagar los sueldos. A este rubro no se lo ayudó como a otros”, afirmó el propietario del complejo ubicado en Zanni y Tibiletti. “Hay varios puntos que tiene el protocolo, con medidas importantes para proteger la salud de las personas que vienen a jugar. Pero sabemos que no tenemos fecha de regreso. Nosotros fuimos los primeros que cerramos, porque lo hicimos incluso antes de que se decrete la cuarentena obligatoria. Y estamos seguros de que vamos a ser los últimos en abrir, sobre todo las canchas que son cerradas”, se resignó. “Hay gente que vive de esto solamente. Además están los profes de las escuelitas que también se quedaron sin trabajar. Es grave la situación”, finalizó.