El seleccionado argentino de boccia no podrá participar en la Copa América 2025, que se disputará del 5 al 14 de octubre en Cali, Colombia. A menos de dos semanas del inicio del certamen, la Secretaría de Deportes de la Nación informó a los deportistas que no hay fondos disponibles para costear el viaje, a pesar de que el presupuesto ya había sido aprobado mediante el Expediente N.º 179/25. Del equipo nacional forma parte la nacida en Gualeguay, Stefanía Ferrando.
Stefanía Ferrando y el sueño frustrado del seleccionado de boccia
Stefanía Ferrando, medallista paralímpica y abanderada en París, entre los afectados por un recorte presupuestario que deja afuera al seleccionado argentino.
Stefanía Ferrando una referente de la Boccia en Argentina.
La medida afecta a siete deportistas, incluidos sus asistentes deportivos, cuerpo técnico y una kinesióloga. Entre ellos se encuentra la entrerriana Stefanía Ferrando, referente del deporte adaptado argentino, abanderada en los Juegos Paralímpicos París 2024 y reciente medallista de bronce en parejas mixtas BC3 junto a Rodrigo Romero.
Habló Stefanía Ferrando
“El motivo que nos dieron para cancelar el viaje fue que el presupuesto, que ya estaba asignado, se redujo a la mitad y además recién estaría disponible en noviembre”, explicó Ferrando con pesar.
Un golpe al deporte adaptado
La Copa América es uno de los torneos más importantes de la temporada para este deporte, ya que otorga plazas directas al Mundial de Boccia 2026 a quienes consigan medallas de oro, plata o bronce. Para el seleccionado argentino, era el principal objetivo del año.
“Hoy ya no hay una solución posible, porque la inscripción al torneo ya cerró. Y organizar un evento de este nivel lleva meses: hotelería, alimentación, transporte, estadios, fixture, canchas, árbitros, voluntarios… nada se puede resolver de un día para el otro”, lamentó la deportista del Club Bancario de Gualeguay.
El plantel venía realizando una preparación intensiva desde comienzos de año, con concentraciones mensuales de la selección y entrenamientos individuales en sus respectivos clubes. El trabajo, sin embargo, no podrá reflejarse en el campo de juego.
“Esta situación afecta mucho al seleccionado. Todo el trabajo de meses queda sin la posibilidad de ponerse a prueba en la competencia más importante. También se pierde la chance de clasificar directo al Mundial, que era el gran objetivo”, concluyó Ferrando.
Una señal preocupante
La cancelación deja en evidencia una creciente preocupación en el ámbito del deporte adaptado argentino: la falta de recursos y planificación para garantizar la participación internacional de atletas que representan al país en los más altos niveles de competencia.
La ausencia de Argentina en esta Copa América no solo implica una oportunidad perdida para los deportistas, sino también un retroceso en el desarrollo y visibilidad de una disciplina que ha sabido cosechar logros significativos en los últimos años.